Un proyecto de enmienda para mejorar la seguridad de las instalaciones militares fue sometido el lunes para su primera lectura ante el Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional (APN), la máxima legislatura de China.
El proyecto, que amplía la definición de las instalaciones militares para incluir los puestos de control fronterizo y guardacostas, así como cualquier instalación temporal establecida según las necesidades del combate, fue presentado a la sesión bimestral del Comité Permanente de la APN, que comenzó ayer lunes y concluirá el sábado.
El proyecto de enmienda también comprende las instalaciones de investigación, fabricación, pruebas y almacenamiento de las principales empresas de la industria de defensa.
Han surgido conflictos entre la seguridad militar y las necesidades de las comunidades locales, explicó Qi Jianguo, subjefe del Estado Mayor General del Ejército Popular de Liberación (EPL) de China.
La ley debe ser revisada para fortalecer la coordinación entre las autoridades militares y civiles y establecer claramente los límites, según Qi.
El proyecto de enmienda exige a los gobiernos de nivel distrital y superior que consulten a los órganos militares sobre los planes de desarrollo socioeconómico, la planificación urbana y las obras de construcción que afecten a las instalaciones militares, además de urgir a los militares a que consideren las necesidades económicas y sociales de las comunidades locales a la hora de desarrollar planes militares. Asimismo les pide que consulten a los gobiernos locales antes de establecer bases y que sometan sus programas a una evaluación de impacto medioambiental.
El proyecto también insta a evitar el establecimiento de instalaciones militares en zonas civiles concurridas y a no desarrollar obras civiles cerca de bases militares.
Con el fin de fomentar la seguridad, el proyecto de ley especifica diferentes niveles de seguridad en las zonas militares, regula la construcción cercana a los aeropuertos militares y prohibe cualquier actividad civil que pudiera afectar a la radio militar.
El documento asimismo define detalladamente las medidas que se pueden tomar contra los intrusos, como la expulsión forzada, la detención de los infractores severos y su entrega a la policía o a los departamentos de seguridad nacional, además de la confiscación de cualquier aparato, herramienta o artículo que porten con tal de suprimir cualquier barrera que amenace a la seguridad.