BRASILIA, 19 mar (Xinhua) -- La estatal Petrobras adquirió 50 por ciento de una refinería en Pasadena, Estados Unidos, en 2006, con base en un laudo incompleto, lo que resultó en grandes perjuicios económicos para la empresa brasileña.
Al momento de la adquisición, la presidenta Dilma Rousseff ocupaba la presidencia del Consejo de Administración de Petrobras, que en 2012 se vio obligada a adquirir el 50 por ciento restante de la refinería, que pertenecía a la belga Astra Oil.
En su edición de este miércoles, el diario "Estado de Sao Paulo" publicó una nota que indica que la adquisición fue blanco de investigaciones de la Policía Federal, el Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU), el Ministerio Público y el Congreso, por sospecha de sobrefacturación y evasión de divisas.
El comunicado de la presidencia con las explicaciones del caso es una respuesta a la nota publicada por diario paulista.
Petrobras habría adquirido el 50 por ciento de la refinería por 360 millones de dólares, y luego fue obligada por un fallo judicial en los Estados Unidos a comprar el resto de la unidad a partir de una cláusula del contrato llamada Put Option.
De acuerdo con la presidencia de la República, el documento presentado al Consejo de Administración de Petrobras no incluía esa cláusula, así como otras informaciones relevantes.
"Se supo que tal resumen era técnica y jurídicamente defectuoso, pues omitía cualquier referencia a las cláusulas Marlim y de Put Option que integraban el contrato que, si conocidas, seguramente no serían aprobadas por el Consejo", señala el comunicado oficial.
Las condiciones de la compra sólo fueron conocidas en su totalidad cuando, en 2008, se analizó la posibilidad de compra de las acciones pertenecientes a la empresa belga.
Con base en esas informaciones, el Consejo de Petrobras decidió entonces no aprobar la compra del 50 por ciento restante, pero un proceso arbitral desarrollado en Nueva York y las cortes de Texas dieron la razón a Astra Oil.
En 2012, Petrobras fue obligada a pagar 839 millones de dólares a la empresa belga por su mitad de la planta.
Un año antes de la operación con la Petrobras, la refinería en Pasadena había sido adquirida por la Astra Oil en apenas 42,5 millones de dólares.
La publicación de los detalles del caso llevó a parlamentarios de la oposición a promover la incorporación del tema en la agenda de la Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) sobre la Petrobras aprobada en la Cámara de Diputados la semana pasada.