El objetivo de controlar la inflación en el 3,5 por ciento para este año se podrá lograr gracias a que el aumento estable en la producción de cereales ha ayudado a aliviar la presión sobre los precios de los alimentos, afirmó hoy lunes la edición para ultramar del Diario del Pueblo, el rotativo oficial del Partido Comunista de China (PCCh).
China ha registrado otra cosecha abundante de cultivos en 2013, con un aumento de 2,1 por ciento interanual, hasta los 601,94 millones de toneladas, lo que marca el décimo año consecutivo de crecimiento, según muestran los datos oficiales anteriores.
El incremento en el suministro tiene un "gran significado para China al guiar las expectativas del mercado y estabilizar los precios generales, ya que que los alimentos ponderan cerca de un tercio en el cálculo del índice de precios al consumidor (IPC) del país", agregó el diario.
"Cualquier alza de los precios de los alimentos podría afectar a las expectativas, por lo que se podría provocar un pánico comprador, lo que conduciría a una nueva subida", señaló Zhang Zhenghe, profesor de la Universidad de Agricultura de China, citado por el diario.
En octubre, el IPC de China subió un 3,2 por ciento interanual, por encima del 3,1 por ciento de septiembre. En los primeros diez meses del año, el IPC se situó en una media del 2,6 por ciento.
Gracias a la buena cosecha agrícola y a otros factores, como las prudentes políticas monetarias del gobierno, el IPC de China llegaría al 2,7 por ciento para todo el año, un nivel bastante inferior a la meta del 3,5 por ciento establecida por el gobierno, apuntó Liang Ping, economista en jefe del Banco de Comunicaciones.
Además, el diario China Securities Journal publicó hoy lunes un informe del centro de monitoreo de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma (CNDR, máximo órgano de planificación económica del país), en el que se indica que a pesar de la cosecha abundante, el país se enfrentará a un aumento más rápido de los precios de los alimentos el año próximo.
El documento mencionó el alza de los costes de producción y del trabajo, así como el aumento de los precios mínimos de adquisición, como los principales factores que conducirán a la subida.
"El ascenso de los precios de los alimentos podría elevar el nivel general de precios en una media de 0,2 puntos porcentuales a 0,5 puntos porcentuales el próximo año", concluye el informe.