Por Fan Jianqing, corresponsal del Diario del Pueblo en Argentina
Con el desarrollo rápido de las relaciones entre China y América Latina, y especialmente entre China y Argentina, ¿qué opinan los líderes argentinos sobre el “Sueño Chino”, sueño que refleja el deseo del gran rejuvenecimiento de la nación china? Con esta pregunta entrevisté con Amado Boudou, vice presidente de Argentina, quien manifestó que el “Sueño Chino” representa una gran oportunidad para Argentina, y que espera que el “Sueño Chino” también se convierta en el sueño mundial.
Con respecto a la situación actual de las relaciones bilaterales, el señor Boudou no tuvo dudas: “Las relaciones entre China y Argentina se encuentran muy buen momento, pero aun nos queda mucho por hacer para promoverlas. Las relaciones bilaterales no deben ser una foto inmóvil, sino una película que no deja de desarrollarse. Concretamente, estoy convencido de que las cooperaciones económicas entre ambos países progresarán sin parar. Por ejemplo, el Grupo de la Presa Gezhouba ganó el contrato de un proyecto para una estación hidroeléctrica de gran dimensión en San Cruz, provincia sureña de Argentina, con un valor estimado de inversión de 4.000 millones de dólares. La inversión china es muy importante para Argentina, y en cambio, Argentina juega un papel muy influyente para la seguridad alimentaria de China y de todo el mundo.”
En los últimos años las relaciones bilaterales entre China y Argentina han experimentado un desarrollo dinámico. Por un lado se realizaron visitas de líderes con mucha frecuencia, y por el otro lado, se ha profundizado continuamente la cooperación en el sector económico, reflejada por el incremento del volumen de comercio y el aumento de las inversiones de China a Argentina.
En el año 2012, el Banco de Industria y Comercio de China adquirió con éxito el Banco Estándar de Argentina, la primera vez que un banco chino realiza la compra de mayores acciones de un banco comercial extranjero importante. En marzo de este año, los trenes modernos fabricados en China comenzaron a circular en el metro de Buenos Aires. A principios de este mes, el Ministerio de Transporte de Argentina declaró que habían acordado con China un pedido de 81 vagones de trenes urbanos, con un valor de 90 millones de dólares, para renovar los trenes urbanos de la capital. Al mismo tiempo, las cooperaciones entre ambos países en el sector cultural también se han estrechado. En los dos Institutos de Confucio en Argentina se han registrado más de 1.200 estudiantes, y recientemente la Asociación de Escritores Argentinos invitó a la delegación de la Asociación de la Poesía de China a celebrar recitales en Argentina junto a poetas locales.
Cuando se le preguntó si el “Sueño Chino” representa para los países latinoamericanos y para Argentina una oportunidad o un desafío, el señor Boudou manifestó tajantemente que el “Sueño Chino” es una gran oportunidad para Argentina. Por una parte, el mundo se desarrollará con estabilidad sólo si China, que es un gran país con una población enorme, logra un buen desarrollo. Y sin un desarrollo estable, no es posible que gocemos de un mundo pacífico. Por otra parte, si China cuenta con más población “modestamente acomodada”, Argentina tendrá más oportunidades para participar y compartir su desarrollo.
Durante la entrevista me di cuenta de que el señor Boudou conocía muy bien las políticas chinas, y es un buen ejemplo es el uso de la expresión “modestamente acomodada”, que es muy específica y oficial en China. En agosto pasado, Boudou visitó a China, y cuando regresó a su país declaró públicamente que con la visita admiraba más los éxitos de desarrollo que había logrado China, y que tenía mucha confianza en el futuro prominente de la economía china. Durante la recepción celebrada en octubre por la Embajada China en Argentina con motivo del Día Nacional de China, el señor Boudou mencionó de nuevo su visita a China, y expresó en nombre del gobierno argentino las felicitaciones por los logros que China había conseguido con la construcción de un socialismo con características chinas y una sociedad modestamente acomodada.
Cuando se le preguntó por sus expectativas sobre “Sueño Chino”, Boudou afirmó que esperaba que el “Sueño Chino” se convirtiera en el “Sueño Mundial”. “El Sueño Chino” procura que los chinos desfruten de una vida a un nivel más alto, que necesariamente generará mayor demanda de alimentos, lo que constituirá una oportunidad muy importante para Argentina, que es uno de los mayores países exportadores de alimentos del mundo.” Manifestó, “Por supuesto, espero que las relaciones y cooperaciones entre China y Argentina no se limiten a la cooperación alimentaria, sino que se expandan a otros sectores como la ciencia y tecnología, la cultura, etc. Espero que más productos argentinos puedan acceder el mercado chino.”
Ante la insistencia del secretario, el señor Boudou se despidió de nosotros para acudir a una reunión, pero antes de cruzar la puerta, dio media vuelta y nos dijo con una sonrisa: “¡Avancemos hacia el Sueño Chino!”
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