BRUSELAS, 27 mar (Xinhua) -- Catherine Ashton, jefa de Política Exterior de la Unión Europea, pidió hoy poner fin a la violencia en República Centroafricana y afirmó que está alarmada por la cada vez más deteriorada situación en Bangui, capital de República Centroafricana.
"Se debe detener la violencia y todos los civiles deben ser protegidos. Las autoridades de transición de República Centroafricana deben ser apoyadas en su combate a la impunidad y en sus esfuerzos encaminados a promover las iniciativas de diálogo y mediación", indicó Ashton en una declaración.
La acción combinada de la fuerza africana MISCA y la operación francesa Sangaris es esencial para contener la tensión y restablecer el orden público tan pronto como sea posible y cualquier ataque contra ellas es "inaceptable", señaló la jefa de la diplomacia europea.
"Condeno en términos enérgicos los asesinatos selectivos de civiles con base en la religión y etnicidad. Estoy particularmente alarmada por la vulnerabilidad de las minorías, quienes son, cada vez más, víctimas de ataques de represalia", agregó Ashton.
Ashton pidió a la comunidad internacional "actuar con prontitud" para evitar un mayor derramamiento de sangre y dijo que la Unión Europea participará en los esfuerzos encaminados a restablecer la estabilidad y seguridad en Bangui y en el resto de ese país.
Los enfrentamientos estallaron en República Centroafricana hace un año cuando el llamado grupo rebelde Seleka, de mayoría musulmana, destituyó el gobierno y colocó a Michel Djotodia como su presidente.
La violencia ha vuelto aumentar en los últimos meses luego de que grupos cristianos comenzaron a formar lo que describen como milicias de autodefensa contra los combatientes del grupo Seleka. La crisis provocó una intervención militar de Francia y la Unión Africana y, finalmente, la dimisión del presidente Djotodia.