Un total de 659 iraquíes murieron y otros 1.373 resultaron lesionados en los ataques violentos ocurridos en Irak en noviembre, se indicó en una declaración emitida hoy por la Misión de Asistencia de Naciones Unidas para Irak (Unami, por sus siglas en inglés).
La declaración señaló que 565 civiles (incluyendo a 120 elementos de la policía civil) y 94 integrantes de las fuerzas de seguridad iraquíes murieron en actos terroristas y violentos perpetrados en noviembre, mientras que 1.186 civiles y 187 integrantes de las fuerzas de seguridad resultaron heridos.
Bagdad fue la provincia peor afectada con 224 civiles muertos y otros 399 heridos, seguida por Nínive, Salahudin y Diyala. Otras provincias como Anbar, Kirkuk, Babil y Wasit reportaron menos víctimas, agregó la declaración.
Mientras el derramamiento de sangre continúa en este país, Nickolay Mladenov, representante especial del secretario general de la ONU para Irak y jefe de la Unami, exhortó a las autoridades iraquíes a llevar a cabo los esfuerzos necesarios para proteger a la gente, añadió la declaración.
"Aunque los indiscriminados ataques con bombas y de otro tipo siguen cobrando una terrible cuota a los iraquíes cada día, estoy profundamente preocupado por la reciente oleada de asesinatos estilo ejecución que han sido realizados de una particular forma espantosa y atroz", dijo Mladenov.
"Como un asunto de ugrencia, las autoridades iraquíes deben tomar medidas inmediatas para encontrar y pedir cuentas a los responsables de estos crímenes e implementar medidas efectivas para garantizar la protección de todos los ciudadanos", agregó el representante especial.
En los últimos meses, Irak ha sido escenario de su peor brote de violencia de los últimos años y el frente de Al Qaeda en Irak es, en la mayoría de los casos, el responsable por estos ataques masivos, lo que genera temores en el sentido de que el grupo terrorista y otros milicianos puedan regresar a una violencia generalizada, en particular ahora que Irak está intentando rechazar la propagación de la creciente violencia en la vecina Siria.
Alrededor de 7.157 civiles y 952 integrantes de las fuerzas de seguridad iraquíes han muerto en el período enero-noviembre de 2013, según cifras de la ONU.