SEUL, 8 abr (Xinhua) -- La República Popular Democrática de Corea (RPDC) tiene que asumir todas las responsabilidades por las consecuencias derivadas del cierre del parque industrial conjunto, ubicado en la localidad fronteriza de Kaesong, en territorio de la RPDC, dijo hoy el Ministerio de Unificación surcoreano mediante un comunicado divulgado por correo electrónico.
"La decisión unilateral de Corea del Norte (RPDC) de poner en marcha esta medida (el retiro de todos los empleados de la RPDC de Kaesong) no puede ser justificada de ningún modo, y Corea del Norte será responsable de todas las consecuencias", afirmó el ministerio.
El Ministerio de Unificación lamenta profundamente el anuncio de Pyongyang sobre una suspensión tentativa del parque industrial de Kaesong y el retiro de todos sus empleados de este complejo, y hará todo lo posible para garantizar la seguridad de los trabajadores surcoreanos allí y para proteger la propiedad surcoreana, dice el texto.
La declaración fue emitida después de que Pyongyang anunciara el retiro de todos sus empleados de la zona industrial intercoreana, donde operan 123 empresas surcoreanas las cuales dan empleos a alrededor de 53.000 trabajadores de la RPDC.
Kim Yang Gon, secretario del Comité Central del Partido de los Trabajadores de Corea, anunció en un comunicado que "la RPDC retirará a todos sus empleados de la zona", informó la agencia oficial de noticias KCNA.
Kim dijo que las operaciones en esa zona se suspenderán de manera provisional e indicó "el desarrollo de la situación en los próximos días dependerá totalmente de la actitud de las autoridades surcoreanas".
El retiro de los empleados de la RPDC, que se anunció cinco días después de que Pyongyang prohibiera la entrada de los trabajadores y vehículos surcoreanos al parque industrial, provocará prácticamente la suspensión de las operaciones. Hasta hoy, permanecían en el complejo 475 trabajadores surcoreanos, de los cuales 77 tienen previsto regresar a Seúl el martes.
En declaraciones hechas el jueves ante los legisladores, el ministro surcoreano de Denfensa, Kim Kwan-jin, dijo que acordó personalmente el retiro de los civiles de Kaesong porque podrían estar en peligro en caso de que la RPDC lleve a cabo acciones de provocación militares.
El ministro también subrayó que si los ciudadanos surcoreanos son tomados como rehenes, el gobierno de Seúl dispone de un plan de contingencia militar para liberarlos.
La tensión se ha incrementado en la Península Coreana después de que la RPDC realizara su tercera prueba nuclear el pasado 12 de febrero, en protesta por los ejercicios militares conjuntos de Estados Unidos y de la República de Corea.
Recientemente, las autoridades de Pyongyang declararon haber entrado en un "estado de guerra" con Seúl, y amenazaron con lanzar un ataque nuclear preventivo para la autodefensa. También enumeraron varias bases militares en Guam, un territorio de ultramar de Estados Unidos, así como el estado norteamericano de Hawai, como posibles blancos.