El Consejo de Seguridad de la ONU condenó el jueves los recientes ataques rebeldes en la República Centroafricana, y pidió a todas las partes que busquen una solución pacífica a la actual crisis del país mediante el diálogo político.
"Los miembros del Consejo de Seguridad reiteran su fuerte preocupación por la situación en la República Centroafricana", afirma una declaración publicada por el organismo de 15 naciones la noche del jueves.
"Condenan los continuos ataques en varias localidades perpetrados por la coalición de grupos armados 'Seleka' que socava gravemente el Acuerdo Integral de Paz de Libreville, y amenaza tanto a la vida de la población civil como a la estabilidad de la República Centroafricana", explica el comunicado.
El gobierno de la República Centroafricana perdió la localidad de Kaga Bandoro a los rebeldes del norte el martes, la última de una serie de localidades que han pasado a estar bajo el control de Seleka en las últimas semanas.
Según los informes mediáticos, los rebeldes entraron al Kaga Bandoro después de que el ejército abandonara sus posiciones bajo un intenso tiroteo.
El país se enfrenta ahora a su mayor reto de seguridad desde que se formara el actual gobierno en enero de 2009 tras un diálogo político integral.
La coalición de rebeldes, que solo cuenta con unas semanas de vida, parece estar ganando ímpetu en sus avances, poniendo en peligro todos los acuerdos de paz firmados en los últimos años.
Seleka acusa al gobierno de no respetar los Acuerdos Globales de Paz de Libreville, firmados entre 2006 y 2007.
En el comunicado de prensa, el Consejo de Seguridad reitera su exigencia de que los grupos armados cesen las hostilidades de manera inmediata, se retiren de las ciudades capturadas y dejen de avanzar hacia Bangui.
Los 15 miembros del Consejo apelaron a todas las partes implicadas a que no lleven a cabo actos de violencia contra los civiles, a que respeten los derechos humanos, mientras enfatizan que los responsables de violar las leyes deberían ser responsabilizados.
"Vuelven a pedir a todas las partes que busquen una solución pacífica involucrándose en un diálogo político apropiado", afirma el comunicado.
En el mismo documento, el Consejo de Seguridad enfatiza la responsabilidad del gobierno de la República Centroafricana de mantener la ley y el orden, y garantizar la seguridad y la protección de la población civil.
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