El seleccionado chileno Mark González no sufre una enfermedad que determine su alejamiento definitivo del fútbol, dijo hoy el médico encargado de su recuperación en la capital chilena, al desmentir las afirmaciones del presidente de su equipo actual, el CSKA de Moscú, Rusia.
"Lo de Mark no es una enfermedad, se equivoca... Él llegó con una lesión que le produjo una inflamación importante en la pierna, pero lo operaron y ya pasó el peligro. Tiene que recuperar su fuerza, la flexión de la pierna y evaluar cuándo va a volver", dijo el kinesiólogo Pedro Oñate a la edición online del periódico local "El Mercurio".
"La evolución de Mark es positiva, debería estar listo para jugar en un mes o un mes y medio", expresó tajante el ex médico de la selección chilena.
Oñate salió al paso de este modo a las declaraciones de Yevgueni Guiner, presidente del club ruso, donde milita el chileno, quien aseguró que lo más prudente es que el chileno deje definitivamente el fútbol.
"Ahora está curándose. Más que una lesión, lo que él sufre es una enfermedad. Podría haber tenido graves consecuencias. Creo que González debe colgar las botas (abandonar el fútbol)", comentó el dirigente del CSKA al diario "Sport-Express".
El volante de 28 años, con un pasado en el Liverpool, Betis y Real Sociedad, fue diagnosticado con síndrome compartimental tras un entrenamiento el pasado mes de noviembre, una dolencia que lo llevó a una intervención quirúrgica y la que según el propio jugador reconoció, pudo haberle costado la vida o la amputación de la pierna.
"Si vuelve a recibir un golpe en la misma zona, tendría una lesión distinta a ésta. Si se recupera bien, no quedará comprometido para el futuro", comentó el médico a cargo de la recuperación de jugador de la selección chilena.
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