LA HABANA, 24 abr (Xinhua) -- Con la nueva Ley de Inversión Extranjera, Cuba no está abandonando el camino socialista, sino fortaleciendo el papel de las inversiones con vistas a fomentar un crecimiento económico dinámico para el desarrollo del país.
"La participación de la inversión extranjera en la economía no implica que vamos a volver al capitalismo, ni a entregar las riquezas de la nación. Por el contrario, está dirigida a contribuir al desarrollo de nuestro socialismo para que sea próspero y sustentable", afirmó el ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca.
Al intervenir anoche en el programa televisivo Mesa Redonda, Malmierca subrayó que con la legislación que entrará en vigor en junio próximo se busca, además de capital, tecnología, mercados y encadenamientos productivos.
Según cálculos preliminares, Cuba necesita un flujo de capitales de unos 2.000 millones de dólares anuales.
Entre los sectores priorizados figuran agricultura, industria alimentaria, energía y minas, esfera azucarera e industrias en general, así como el área farmacéutica y biotecnología, comercio mayorista, salud, construcción, turismo y transporte.
Esta Ley, aprobada por el parlamento en marzo último, tiene por objeto establecer el marco legal de la inversión extranjera en el país sobre la base del respeto a la ley, la soberanía e independencia de la nación y el beneficio mutuo para contribuir al desarrollo económico en función de "una sociedad socialista próspera y sostenible".
La nueva normativa, a diferencia de su antecesora, Ley 77 de 1995, contiene los principios y garantías para atraer a la inversión, define las modalidades, el régimen de autorización negocio por negocio en correspondencia con las prioridades pautadas por el Estado cubano, y sus bondades tributarias.
El texto legal ofrece a los inversionistas garantías de plena protección y seguridad y no pueden ser expropiados, salvo por motivos de utilidad pública o interés social con la debida indemnización por su valor comercial establecido de mutuo acuerdo.
También, el Estado cubano garantiza la libre transferencia al exterior en moneda libremente convertible, sin pago de tributos u otro gravamen, de los dividendos o beneficios que obtenga el inversionista extranjero.
Malmierca explicó que la economía cubana necesita crecer a tasas de acumulación más allá del 20 por ciento, lo que hará posible que el Producto Interno Bruto (PIB) se incremente un cinco por ciento de manera sostenida.
La viceministra de Trabajo y Seguridad Social, Zamira Marín, agregóque el régimen laboral contemplado en la nueva Ley "mantiene los principios que protegen los derechos de los trabajadores" en la isla.
Marín acotó que esta legislación posibilitará la creación de nuevas fuentes de empleo, con salarios que estarán sujetos a la complejidad de los cargos y la idoneidad del personal.
Por su parte, el director de Ingresos del ministerio de Finanzas y Precios, Vladimir Requeiro, hizo referencia a las garantías y el régimen especial de tributos que tendrán los inversionistas.
"Se les garantizará exportar e importar directamente lo necesario para sus fines, si bien adquirirán preferentemente bienes y servicios en el mercado nacional, ofrecidos en iguales condiciones de calidad,precio y plazos de entrega a las del mercado internacional", dijo Requeiro.
Añadió que se eximirá del pago del impuesto sobre los ingresos personales a los inversionistas extranjeros socios en empresas mixtas o partes en contratos de asociación económica internacional.
También se eximirá del pago del impuesto sobre las utilidades a las empresas mixtas y partes en los contratos de asociación económica internacional por un período de ocho años a partir de su constitución.
El presidente cubano Raúl Castro ha expresado "la imperiosa necesidad de fomentar y atraer la inversión extranjera en interés de dinamizar el desarrollo económico y social del país".
De lo que se trata con la nueva Ley es orientar mejor la inversión extranjera de modo que responda a los intereses del desarrollo nacional, "sin que el país renuncie a su soberanía y al sistema político social escogido: el socialismo".