La cadena sueca de productos para el hogar Ikea, que detectó carne de caballo en las albóndigas que oferta en Suecia y la República Checa, retiró también el producto en República Dominicana como medida precautoria, confirmó hoy la compañía a través de su oficina en Santo Domingo.
Ejecutivos de la cadena señalaron además que autoridades de salud dominicanas han sometido el producto a estudio, luego de que alertó al gobierno local sobre el retiro de las albóndigas del mercado dominicano.
"Estamos seguro de que nuestras albóndigas no pertenecen al lote donde encontraron carne de caballo, pero por un asunto de precaución se están haciendo pruebas", explicó la gerente general de mercadotecnia del gigante sueco en República Dominicana, María de los Santos en conferencia con periodistas.
"La multinacional ha decidido hacer pruebas alrededor de todo el mundo", agregó De los Santos.
A través de su cuenta en Twitter, Ikea anunció la noche del lunes sobre el retiro del producto en los países donde tiene presencia, en especial los europeos.
Ikea suspendió la venta de albóndigas en Suecia desde que se detectó carne de caballo en el producto de su proveedor, medida que ya había tomado en sus tiendas de la República Checa, donde se comercializa el producto etiquetado "Made in Sweden" (Hecho en Suecia).
El escándalo de la carne de caballo, que se extendió a varios países europeos, salió a la luz a mediados de enero pasado, cuando inspectores de alimentos irlandeses detectaron carne de caballo en hamburguesas de res congeladas producidas por compañías de Irlanda y del Reino Unido.
Las albóndigas deben contener principalmente carne de cerdo y res, como indica la etiqueta.
La mayoría de las albóndigas de Ikea fueron producidas por la compañía sueca Dafgard, la cual fue informada de que se halló carne de caballo en uno de los tres análisis realizados por las autoridades checas.
Ikea tiene más de 300 tiendas en cuatro continentes del mundo.
La empresa sueca abrió su primera tienda en Santo Domingo, República Dominicana en febrero del 2010, la primera en toda América Latina.