Cincuenta y cuatro de las 69 comunidades en el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis) de Bolivia aceptaron la construcción del segundo tramo carretero que pasa por esa reserva forestal, según resultados de una consulta avalada hoy por el Tribunal Supremo Electoral (TSE).
El director del Servicio Intercultural de Fortalecimiento Democrático (Sifde) del TSE, Juan Carlos Pinto, explicó que la consulta en el Tipnis comenzó el 29 de julio y concluyó el 7 de diciembre de 2012 y se ejecutó por primera vez en Bolivia.
Pinto dijo que el objetivo de este proceso fue permitir que las comunidades indígenas se expresaran sobre el futuro de su territorio, además de la calidad de vida que buscan para ellos y sus descendientes.
"En resumen tenemos el informe del proceso que hemos realizado en las 69 comunidades, tenemos que de 58 comunidades donde efectivamente se ha hecho la consulta, estamos hablando de tres que han rechazado el proyecto de la carretera y una que ha dicho que se ratifica en la intangibilidad", indicó en rueda de prensa.
El TSE acompañó este proceso como veedor y tomó nota y registró de toda la realización de la consulta, la cual tropezó con diferentes problemas, desde climáticos que impidieron la movilización de las brigadas por la reserva, hasta políticos, por el rechazo de algunos dirigentes del Tipnis y de otros ajenos a esa realidad.
Pinto detalló que de las 69 comunidades que habitan el Tipnis, sólo 58 fueron consultadas porque cinco comunidades presentaron un acta donde señalan que no quieren participar de la consulta y a seis comunidades no ingresaron las brigadas porque existía algún riesgo.
"En total 11 comunidades no han participado de la consulta", aclaró.
El informe se presentó este lunes al gobierno sobre el acompañamiento del proceso de consulta democrática a indígenas en amazonia indígena.
El informe que fue entregado en un acto público al ministro de Obras Publicas, Vladimir Sánchez, consta de 740 páginas y tiene tres partes.
La primera establece el contexto de la realización de la consulta, la forma organizativa, instrumentos utilizados en el proceso de observación.
La segunda parte se refrere a la observación de comunidad por comunidad y la tercera parte es un cuadro resumen del proceso además de los aprendizajes democráticos.
Por su parte la presidenta del TSE, Wilma Velasco, señaló que este informe tiene características cualitativas y no cuantitativas.
En el mismo se detalla cómo se trabajó comunidad por comunidad, con registros de video y actas firmadas por los corregidores.
La consulta comenzó en las comunidades de Oromomo y San Miguelito.
El mecanismo democrático se respalda en la Constitución Política del Estado y convenios internacionales.
La consulta, consagrada en la Carta Magna, con participación del TSE, preguntó a los pueblos originarios de las comunidades amazónica de Bolivia sobre la intangibilidad del Tipnis y la construcción del tramo II de la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos.
El gobierno boliviano recordó que la oposición, al igual que algunas organizaciones no gubernamentales y dirigentes indígenas, manejaron el tema con fines políticos e intereses económicos.
Para ello impulsaron marchas de indígenas y recursos legales ante la justicia, con la única intención de paralizar el proceso, que busca dar la oportunidad a los originarios a pronunciarse y ejercer su derecho sobre la decisión de su futuro.
El conflicto del Tipnis ha causado un gran desgaste al presidente boliviano Evo Morales, quien llegó al cargo en 2006 como líder indígena y sindical.
La presión social le llevó a anunciar la suspensión temporal del proyecto hasta la celebración de un referendo en los departamentos de Beni y Cochabamba.