Brisbane,06/12/2013 (El Pueblo en Línea) - Un artista con conocimiento del drama capta el poder de la introspección en su exposición actual.
Incluso sin su habitual pólvora y explosiones, el artista Cai Guoqiang aún tiene el poder de dejar a sus espectadores con la boca abierta con su primera exposición en solitario en Australia. “Cai Guoqiang: De vuelta a la Tierra”, que abrió sus puertas en la Galería de Arte de Queensland Art en Brisbane a mediados de noviembre, muestra el cambio del artista hacia un compromiso con la Tierra.
Hablando en mandarín con su fuerte acento de su provincia natal de Fujian, el artista, que reside en Nueva York, no aparenta los más de cincuenta años que tiene.
Aunque ha vivido en Estados Unidos desde 1995, Cai habla con los medios de comunicación occidentales con la ayuda de su traductor. Muchas de sus obras recrean un diálogo entre el este y el oeste. Cai dice que la barrera del idioma nunca ha sido un problema para él.
La pieza central de la exposición, “El Patrimonio”, de 1.100 metros cuadrados, cuenta con 99 réplicas de animales, incluyendo pandas, tigres, osos, jirafas y canguros, que bajan sus cabezas para beber juntos de una charca rodeada de arena blanca.
"Este ambiente encarna mi percepción de un 'paraíso pasado', lejos de las preocupaciones y conflictos del resto del mundo, donde la gente viene de todo el mundo y comparte el mismo espacio", afirma Cai.
Sin embargo, una utopía lírica está llena de incertidumbres, y hay algo inquietante sobre la tranquilidad.
Si la habitación está en silencio, los visitantes pueden oír un incesante goteo que rompe la superficie del agua.
El artista dice que intenta plantear cuestiones que activan este cuadro extraño y tranquilo: lo que une a este zoológico y cómo pueden relacionarse los depredadores y sus presas en este encuentro.
El título de la exposición viene de un poema chino del siglo IV de Tao Yuanming,
Russell Storer, curador de la exposición, dice que Cai siempre intenta hacer conexiones con el contexto local en el que hace sus obras".
Mientras se preparaba para la exposición, Cai visitó Australia muchas veces y en un viaje con su familia en 2011 a Queensland se inspiró de los " lagos de aguas cristalinas que brillan como gemas multicolores".
Aunque sus obras nuevas no contienen ni explosiones ni pólvora, Cai dice que aún hay riesgo en su nueva obra.
"El reto más grande es sin duda la estructura de la obra de ingeniería. 170 toneladas de agua en la galería es como una gran bomba", dice.
Las réplicas de los animales se hicieron en Quanzhou, ciudad natal de Cai, en la provincia de Fujian, y tardaron más de seis meses en terminarlas. Otros elementos como la arena, la fabricación de la charca y el sistema entero de agua fueron todos producidos en Australia.
La exposición, presentada por Turismo y Eventos de Queensland, se prolongará hasta el 11 de mayo de 2014. Además de “El patrimonio” y “Eucalipto”, también exhibirán “Sobre la cabeza”, una obra con noventa y nueve réplicas de lobos corriendo en el aire hacia una pared de vidrio. Esta obra está inspirada en el Muro de Berlín, y creada en 2006 por Cai.
“De vuelta a la Tierra” es una evolución significativa de Cai, dice Chris Saines, director de la galería de Brisbane, que tiene una larga relación de amistad con el artista.
Cai fue presentado en el Trienio de la Galería Asia Pacífico en 1996 y 1999, pero ninguno de sus proyectos fueron expuestos. El proyecto de la explosión de 1996 fue cancelada debido a un accidente, y el de los lobos se hundió en el fondo del río Brisbane durante su traslado.
Sin embargo, el artista no ha tirado la toalla por estos "fracasos" y ahora presenta su "exploración ilimitada del mundo limitado".
El número noventa y nueve aparece con frecuencia en las obras de Cai, como en “El patrimonio” y ”Sobre la cabeza”.
"El número nueve representa la 'larga duración' en la numerología China, mientras que el 99 significa para mí algo que no está del todo completo, dando una sensación de 'escasez y expectativa'", dijo Cai.