Las autoridades han trabajado para derribar las escuelas potencialmente peligrosas con el fin de evitar desastres secundarios, indicó Dan. Además, se realizan esfuerzos para establecer salones de clases temporales con el fin de que todos los estudiantes puedan asistir a la escuela conforme al calendario establecido.
China ha estado trabajando en un proyecto de construcción de viviendas a prueba de sismos desde 2006, el cual ha beneficiado a más de dos millones de familias hasta ahora. En 2009, el gobierno provincial de Gansu propuso construir dos millones de casas a prueba de sismos en un plazo de cinco años.
Un proyecto de renovación de escuelas ha sido aplicado desde 2009, un año después de que un devastador sismo sacudiera el distrito de Wenchuan en la provincia suroccidental de Sichuan. El sismo destruyó numerosas escuelas en el área.