El ministro brasileño de Salud, Alexandre Padilha, afirmó hoy que 79 personas lesionadas durante el incendio en la discoteca permanecen hospitalizadas en cuidados intensivos de un total de 112 heridos.
Aproximadamente el 80 por ciento de esos 112 internados graves son pacientes que sufrieron una intoxicación al inhalar el humo durante el incendio de la discoteca Kiss, de la ciudad de Santa María, en el estado de Río Grande do Sul (sur de Brasil), y el 20 por ciento restante son heridos con quemaduras graves.
Padilha aseguró que 40 de los internados permanecen en hospitales de Santa María y 39 fueron trasladados a centros médicos de Porto Alegre, la capital regional, y ciudades de su región metropolitana, tres de ellos en las últimas horas.
El ministro de Salud brasileño también dijo que en la última noche no se registró ninguna muerte entre los pacientes ingresados en hospitales, aunque advirtió que los próximos días serán "críticos" para los enfermos.
Alertó que las personas que estuvieron en la discoteca y que inhalaron humo podrían aun correr riesgo de contraer una infección respiratoria grave.
Este lunes entre cuatro y cinco asistentes a la fiesta acudieron a centros de salud en Santa María con síntomas de problemas respiratorios y fueron ingresados "con un cuadro pulmonar grave", afirmó Padilha a periodistas en el Centro Deportivo Municipal de Santa María, donde se instaló el velatorio.
El ministro también relató que las autoridades brasileñas se han puesto en contacto con bancos de piel de Sao Paulo, otras partes de Brasil y de países como Argentina, Uruguay y Perú para poder atender a los quemados.