La Cumbre de los Pueblos Chile 2013, de agrupaciones sociales de Latinoamérica, hizo hoy un llamado a pasar de los movimientos reivindicativos a una propuesta política-social integral.
Ese foro se celebró de forma paralela a las cumbres de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños y la Unión Europea (Celac-UE), que concluyó el domingo, y de la propia Celac.
En su Declaración Final, el foro instó a "construir demandas unitarias que aglutinen a todos los actores sociales y pueblos en disputa, y que a su vez permitan trazar un horizonte estratégico hacia el cual avanzar".
Señaló que eso articularía la unidad entre el movimiento sindical, social y político en América Latina, el Caribe y Europa.
"Esto debiera traducirse en una hoja de ruta de trabajo y de movilizaciones para el presente período, pero con perspectivas a largo plazo", afirma el documento, difundido este lunes en Santiago.
La declaración establece que "los derechos y bienes naturales arrebatados a los pueblos deben ser recuperados por medio de la nacionalización, la comunitarización de los bienes y servicios, los medios de producción y el reconocimiento constitucional de la naturaleza como sujeto de derecho".
Esta Cumbre de los Pueblos, que se celebró durante tres días en la Universidad de Chile, expresó su solidaridad con el pueblo palestino "y todos aquellos pueblos y naciones oprimidos por el poder colonizador y el imperialismo".
Igualmente, rechazó las intervenciones cívico-militares en Honduras, Haití y Paraguay.
También expresó su solidaridad con el pueblo cubano en contra del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos, que data de hace más de 50 años, y con la Argentina, en el proceso de recuperación de las Islas Malvinas.
La Cumbre de los Pueblos respaldó la demanda de Bolivia de una salida al mar, y en el caso de Chile, al movimiento estudiantil en defensa de la educación pública, gratuita y al pueblo-nación mapuche contra la represión realizada de parte del Estado.