La policía de la provincia central china de Henan divulgó hoy martes los detalles del testimonio de Min Yongjun sobre el ataque con cuchillo que perpetró el viernes en una escuela rural, dejando heridos a 23 niños y una anciana.
Según ese testimonio, fueron los rumores sobre el supuesto "fin del mundo", que según una profecía maya debería tener lugar el 21 de diciembre, los que le llevaron a atacar a los niños.
Ouyang Mingxing, Subdirector del buró de Seguridad Pública del distrito de Guangshan, precisó que Min, de 36 años de edad, confesó durante el interrogatorio policial que "estaba convencido de que se acercaba su final y quería hacer algo para impresionar al mundo antes de morir".
Min contó a la policía que pensó que un ataque similar a la matanza en una guardería que vio dos años atrás por televisión podría provocar una conmoción.
El hombre se refería a tres ataques en jardines de infancia registrados entre abril y mayo de 2010 en las provincias de Jiangsu, Shandong y Shaanxi, respectivamente. En el caso de Shaanxi, un hombre armado con un cuchillo de carnicero mató a siete niños y dos mujeres.
El agente de policía dijo que la noche anterior al ataque, Min agredió a sus padres y a sus dos hijas, de nueve y dos años de edad, y huyó de la vivienda familiar.
Después de pasar toda la noche deambulando a la intemperie, irrumpió en casa de una mujer mayor y la atacó con un cuchillo de cocina para luego dirigirse a la escuela primaria del pueblo de Chenpeng.
Haciendo referencia al testimonio de Min, Ouyang señaló que aunque el atacante pensó en tirar a un niño desde una ventana del tercer piso, decidió no hacerlo al ver a los niños ensangrentados en el piso de abajo y pensar en sus propios hijos.
"Este testimonio sugiere que Min, que sufre de epilepsia, era plenamente consciente y era capaz de controlarse en el momento del crimen", indicó el funcionario.
El atacante dijo a la policía que había oído las predicciones del "fin del mundo" de una residente local de 61 años llamada Jin Guozhun, en cuya casa se han encontrado más de 70 panfletos relacionados.
Wu Boxin, profesor de la Universidad Popular de Seguridad Pública de China, explicó que Min podría haber sido adoctrinado por los miembros de un culto llamado "Dongfangshandian" (Iluminación Oriental) que ha estado ganando influencia en las regiones centrales de Henan.
La falta de transparencia de las autoridades sobre las circunstancias del ataque ha suscitado duras críticas en todo el país.
Wang Zhexue, jefe del distrito de Guangshan, admitió el lunes al periódico People's Daily que las autoridades locales intentaron ocultar información sobre el ataque porque había menores implicados y porque querían evitar que su divulgación desencadenara ataques similares.
El gobierno municipal de Xinyang destituyó hoy martes a seis personas por haber gestionado las consecuencias del ataque de manera inapropiada. Los destituidos son dos directores de colegio, dos agentes de policía, un funcionario de seguridad del pueblo y el director del departamento de educación del distrito.
Los alumnos de la escuela primaria de Chenpeng volvieron a clase el lunes por la mañana, pero la dirección del centro pidió a sus tutores que les recogieran a la hora de la comida y les volvieran a acompañar al centro después de comer para asistir a las clases de la tarde.
El gobierno ha ordenado que se refuerce la seguridad en las escuelas de la zona apostando agentes armados con bastones de metal y latas de gas lacrimógeno.
Gracias a una campaña de donación promovida por el gobierno, el lunes se habían conseguido acumular 50.000 yuanes (8.020 dólares) para las familias de las víctimas.
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