La calma volvió el martes a una importante ciudad del occidente de Haití, cuyos habitantes protestaron durante una semana para lograr que sea reanudada la construcción de una carretera que une a otra localidad del sur del país.
Las calles de Jérémie, 280 kilómetros al oeste de Puerto Príncipe, estuvieron libres de barricadas y de manifestantes en las calles por primera vez en una semana, aunque las puertas de las escuelas permanecieron cerradas, destacó la prensa local.
Las manifestaciones se iniciaron la noche del martes de la semana pasada cuando la población se enteró de que la compañía que construye la carretera Jérémie-Les Cayes trasladaría su maquinaria fuera de la ciudad.
Cuatro estudiantes resultaron heridos el miércoles por las piedras lanzadas al liceo donde se encontraban mientras que se producían los choques entre los manifestantes y la Policía.
La obra, supuestamente abandonada hace varios meses, está a cargo de la empresa brasileña OAS, y según el ministro de Obras Públicas Transporte y Comunicaciones, Jacques Rousseau, volverá a retomar los trabajos "en las próximas semanas".