MEXICO, 31 may (Xinhua) -- La imposición de aranceles a las importaciones de acero y aluminio que Estados Unidos hace a México tendrá un efecto directo y negativo en los precios de los productos del consumidor estadounidense, consideraron hoy jueves industriales mexicanos.
El presidente de la Cámara Nacional de la industria del Aluminio (Canalum), Ramón Beltrán, calificó de inadecuada la estrategia del presidente estadounidense, Donald Trump, porque al final causará estragos a las empresas y a la población de su propio país.
"Pensamos que esta actitud de proteccionismo daña directamente a las empresas de Estados Unidos", indicó Beltrán en rueda de prensa.
"Definitivamente podemos considerar que la medida no va a tener impacto en nuestra industria porque la industria local es moderna y con alta tecnología", agregó.
La administración del presidente Trump anuncio este jueves un arancel del 25 por ciento a las importaciones de acero y del 10 por ciento a las de aluminio procedentes de la Unión Europea (UE), Canadá y México, a partir del 1 de junio.
Beltrán dijo que pese a las medidas, las empresas en Estados Unidos van a continuar demandando los productos mexicanos porque los necesitan.
"Nos necesitan por la calidad que tenemos y esta cercanía que tenemos de frontera hace que la logística y el costo de transportación sea más eficiente y mejor que con cualquier otro país", dijo Beltrán.
"El factor de tecnología que ofrecen las empresas mexicanas no es un factor que se pueda cambiar de la noche a la mañana", agregó.
De acuerdo con la Canalum, México exporta a Estados Unidos alrededor de 350.000 toneladas de aluminio e importa cerca de las 800.000 toneladas.
No obstante, México no es un productor de la materia prima sino que envía a Estados Unidos más de 150 productos terminados, los tres más importantes: cabezas de motor, latas y perfiles extruidos.
La industria mexicana del aluminio genera 200.000 empleos directos y más de un millón indirectos, a través de las más de 10.000 empresas que integran la cadena, con 200 de ellas como grandes productores.
Beltrán dijo que México va a seguir importando aluminio sin aranceles de Estados Unidos, mientras que las tarifas que impuso Estados Unidos a lo que produce México se trasladará a lo que ellos mismos están comprando.
Además, el presidente de la Canalum descartó que la industria mexicana del aluminio represente un riesgo para la seguridad nacional, como argumenta Estados Unidos.
El caso del acero es un esquema similar, de acuerdo con José Luis de la Cruz, presidente de la comisión de estudios económicos de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), en la misma conferencia de prensa.
"Al igual que en aluminio, en el tema del acero no hay fundamento económico, no hay un razonamiento sostenible que permita afirmar que el acero daña a la economía de Estados Unidos", dijo.
"México es un gran negocio para los exportadores de acero estadounidenses, entonces el sector tampoco debería estar incluido en las medidas anunciadas por el presidente Trump", agregó.
Citando cifras del Departamento de Comercio de Estados Unidos, De la Cruz dijo que en el 2017 México exportó a Estados Unidos 1.972 millones de dólares clasificados como fundición de hierro y acero.
Ello representó solo el 6,21 por ciento del total de importaciones estadounidenses en el rubro.
"Al igual que en aluminio, tenemos una industria siderúrgica moderna", dijo el representante de Concamín.
"Entre el productor y el consumidor estadounidense van a terminar pagando las medidas de política económica del presidente Trump, y él se va a dar cuenta de esto demasiado tarde", agregó.
El mandatario estadounidense había anunciado los aranceles en marzo como parte de un esfuerzo para proteger a la industria y los trabajadores de su país de lo que consideró como una competencia internacional injusta.
En las medidas de este jueves se concedieron exenciones temporales a países como Australia, Argentina y a la República de Corea.