BEIJING, 20 may (Xinhua) -- Con el inicio de su segundo cracker de etileno en el sur de China este mes, la cooperación entre la Corporación Nacional de Petróleo Submarino de China (CNOOC) y la compañía petroquímica Shell ha entrado a una nueva etapa.
El proyecto de 1,2 millones de toneladas ha aumentado a más del doble la capacidad del complejo petroquímico de Nanhai, lo que apoya a la empresa conjunta 50/50 entre CNOOC y el gigante internacional Shell para atender el creciente mercado chino.
"El proyecto de expansión demuestra grandes sinergias entre las capacidades de ingeniería, construcción y administración de CNOOC y las tecnologías avanzadas de Shell en petroquímica", dijo He Zhongwen, presidente de CNOOC Oil & Petrochemicals Co. Ltd.
El proyecto también ofrece una demostración de cómo ha impulsado la cooperación internacional el desarrollo de las industrias energéticas de China que, al igual que muchos otros sectores, se han beneficiado en gran medida de los esfuerzos de apertura de las últimas décadas.
Las empresas energéticas extranjeras han desempeñado un importante papel en la inversión, diseño, construcción y manejo de proyectos energéticos de China, indicó un funcionario del Departamento de Cooperación Internacional de la Administración Nacional de Energía.
Desde 2012, China ha firmado más de 100 acuerdos de cooperación con otros países, ha establecido 56 mecanismos de cooperación energética y ha participado en 29 multilaterales, lo que ha generado varios proyectos influyentes y ha promovido la inversión, tecnologías, equipo y servicios de energía.
"Sin la participación del mercado internacional, China no podrá continuar con su transformación hacia energías limpias y de bajo carbono de la nueva era", dijo Bai Jun del Instituto de Energía Internacional de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma (CNDR).
Además de las asociaciones con empresas energéticas extranjeras, China también ha impulsado las importaciones de energía para satisfacer la demanda nacional y mejorar su estructura energética.
El incremento de las importaciones se produce en medio de la escasez nacional de gas natural en China del año pasado, ahora que el país necesita más energía limpia y de alta calidad para impulsar el desarrollo económico y proteger el medio ambiente.
Zhou Dadi, investigador del Instituto de Investigación de Energía de la CNDR, dijo que la mayor apertura del sector energético aliviará la escasez de energía en China y diversificará el suministro de energía.
Por otra parte, China podría mejorar su desarrollo y gestión energéticas a través del intercambio de tecnologías energéticas, dijo.
Expertos en energía también consideran que la constante apertura de China beneficiará al sector energético global porque el país está explorando todas las formas de cooperación con socios con abundantes recursos energéticos.
Para los inversionistas extranjeros, la firme expansión de China tanto en la industria energética como en la demanda de energía significa un mercado vasto y estable, dijeron.
En 2017, China importó 1,51 millones de toneladas de gas natural licuado y 7,6 millones de toneladas de crudo de Estados Unidos.
Por otra parte, con los gasoductos en construcción, China espera obtener hasta 38.000 millones de metros cúbicos anuales de gas natural de Rusia cuando concluyan las obras.
China abrirá aún más el sector energético, expandirá la cooperación energética internacional en todos los ámbitos, facilitará el comercio y la inversión energéticas, mejorará el entorno para negocios y ayudará a construir un mercado energético mundial más abierto, estable y sostenible, dijo el funcionario de la Administración Nacional de Energía.