MADRID, 24 dic (Xinhua) -- El rey Felipe VI de España instó hoy domingo a los ciudadanos de la región autónoma española de Cataluña (noreste) a emprender un nuevo camino político y social tras las elecciones del pasado 21 de diciembre, que "recupere la serenidad, la estabilidad y el respeto mutuo".
El monarca español deseó que "renazca la confianza, el prestigio y la mejor imagen de esta comunidad en el resto del país y el conjunto del mundo", después del desafío independentista liderado por el ex presidente catalán, Carles Puigdemont.
Felipe VI expresó lo anterior en su tradicional mensaje de Nochebuena, que este año se transmitió por primera vez en la red social Twitter en tiempo real por la cuenta oficial de la Casa del Rey, emitido además en directo desde su canal de Youtube.
El mensaje se produjo apenas tres días después de las elecciones autonómicas catalanas, en las que los partidos independentistas han revalidado su mayoría absoluta pese a perder dos escaños y mayoría social respecto a las anteriores.
En su discurso con motivo de la Navidad, el rey admitió que "2017 ha sido en España, sin duda, un año difícil para nuestra vida en común; un año marcado, sobre todo, por la situación en Cataluña".
"Respetar y preservar los principios y valores de nuestro Estado social y democrático de derecho, es imprescindible para garantizar una convivencia que asegure la libertad, la igualdad, la justicia y el pluralismo político, tal y como señala nuestra Constitución", subrayó.
Exigió además el respeto y el cumplimiento de las normas fundamentales en democracia, porque "cuando estos principios básicos se quiebran, la convivencia primero se deteriora y luego se hace inviable".
Con relación a Cataluña, el monarca expuso que a partir de ahora, "el camino no puede llevar de nuevo al enfrentamiento o a la exclusión, que como sabemos ya sólo generan discordia, incertidumbre, desánimo y empobrecimiento moral, cívico y, por supuesto, económico de toda una sociedad".
Instó a no renunciar a la España que "juntos" han construido los españoles y a seguir "actualizándola".
"Nadie desea una España paralizada o conformista, sino moderna y atractiva, que ilusione; una España serena, pero en movimiento y dispuesta a evolucionar y a adaptarse a los nuevos tiempos", consideró Felipe VI.
Advirtió también que la corrupción se mantiene, junto al desempleo y el terrorismo yihadista, "como una de las principales preocupaciones de la sociedad".
Dijo que ello demanda que sigan tomándose las medidas necesarias para la "completa erradicación de la corrupción y para que los ciudadanos puedan confiar plenamente en la correcta administración del dinero público".
El representante español se pronunció además porque la creación de empleo estable sea siempre "un objetivo esencial y prioritario", así como que continúe "la firmeza y el apoyo político" en defensa de las mujeres víctimas de violencia machista.
Por primera vez durante el reinado de Felipe VI, el Salón de Audiencias de la Zarzuela (sede de la Casa Real) fue el escenario del mensaje con duración de 11 minutos 55 segundos.
Felipe VI de España se dirigió a los españoles acompañado por las banderas del país ibérico y la Unión Europea (UE), así como un busto de Carlos III, símbolos de las Fundaciones Princesa de Asturias y de Gerona, además de una foto familiar junto a la reina y sus hijas.
Al final de su mensaje, deseó una Feliz Navidad a todos los españoles en los distintos idiomas que se hablan en España como castellano, catalán (Cataluña), euskera (comunidad del País Vasco) y gallego (Galicia).