BEIJING, 14 abr (Xinhua) -- La provincia de Hebei y las ciudades de Beijing y Tianjin implementarán un estándar unificado para recortar el uso de revestimientos y pegamentos en la construcción con el objetivo de reducir la contaminación atmosférica.
El estándar, dado a conocer el jueves, fija una cantidad máxima de compuestos orgánicos volátiles (COV) que se podrán usar en la fabricación, el almacenamiento y el uso de los revestimientos y pegamentos de construcción. Se estima que esta medida reducirá los COV en el aire en un 20 por ciento.
La región Beijing-Tianjin-Hebei se ubica en el corazón de la llanura del norte de China, donde la contaminación atmosférica, particularmente el esmog invernal, se acumula con mucha frecuencia debido la alta concentración de emisiones industriales y de automóviles, la escasa circulación del aire y la quema de carbón.
"Los COV son un componente clave del ozono y las PM 2,5, las partículas finas de menos de 2,5 micras de diámetro", indicó Yu Jianhua, ingeniero jefe de la oficina municipal de protección ambiental de Beijing.
Yu explicó que debido al rápido proceso de urbanización, los revestimientos y pegamentos de construcción se han convertido en la principal fuente emisora de COV en las ciudades. En 2015, se consumieron en el país un total de 5,16 millones de toneladas de recubrimientos para la construcción, un aumento de ocho veces desde 2000.
El ingeniero señaló que Beijing ya tenía sus propias reglas sobre el uso de estos materiales, pero que la nueva norma actualiza las restricciones y amplía su alcance para cubrir también a Tianjin y Hebei, donde los reglamentos eran más laxos.
El estándar es la primera regla emitida conjuntamente para las tres áreas en aras de combatir la polución aérea.
Para 2017 la región tiene que reducir la densidad de PM 2,5 en un 25 por ciento con respecto a los niveles de 2012, según un plan de acción gubernamental publicado en septiembre de 2013.
Beijing se está esforzando para cumplir la meta de rebajar la densidad media de PM 2,5 a 60 microgramos por metro cúbico. En los primeros tres meses del año, el promedio fue de 84 microgramos por metro cúbico.
Sin embargo, la calidad del aire de Beijing se encuentra ya entre las mejores 28 ciudades en la región.