BEIJING, 8 mar (Xinhua) -- China no permitirá la guerra o la inestabilidad en la Península Coreana, declaró hoy sábado el ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi.
"La Península Coreana está justo al lado de China. Tenemos una línea roja, que es que no permitimos la guerra o la inestabilidad allí", declaró el canciller durante una rueda de prensa celebrada en Beijing en el marco de la actual sesión anual del máximo cuerpo legislativo nacional.
"Creo que además esto corresponde plenamente a los intereses de las partes del sur y el norte de la península, así como a los intereses comunes de toda la región", opinó el diplomático.
Wang también hizo un llamamiento a la pronta reanudación de las conversaciones a seis bandas, utilizando una metáfora para interpretar la postura de China sobre la situación actual.
"Si se me permite usar algunas metáforas, creo que tenemos que subir la cuesta, quitar obstáculos y seguir el camino correcto", dijo el canciller.
Calificando de esencial el problema nuclear, Wang señaló que lo primero es la desnuclearización, que es el único remedio para que la Península Coreana goce de una paz genuina y perdurable.
"No importa cuán larga o inclinada sea la cuesta, tenemos que trabajar de manera persistente sin pausa alguna", subrayó Wang.
El segundo paso requiere que todas las partes involucradas trabajen arduamente para quitar los obstáculos de la desconfianza mutua, dijo Wang, advirtiendo de la terrible falta de confianza mutua entre las partes, en especial entre la República Popular Democrática de Corea y Estados Unidos.
Wang atribuyó las "continuas tensiones en la Península y la ruptura una y otra vez de las conversaciones a seis bandas" a la difícil situación actual, por lo que pidió a todas las partes "que ejerzan contención, muestren buena voluntad y construyan una confianza mutua poco a poco".
Por último, Wang propuso a todas las partes que sigan el camino correcto, que es el diálogo, señalando que las conversaciones a seis bandas son el único mecanismo de diálogo aceptado por todas las partes.
"La confrontación no puede traer nada más que tensión, y la guerra, a su vez, desastre. El diálogo, las consultas y las negociaciones, sobre una base de igualdad, son el único camino correcto hacia adelante", señaló Wang.
"En su calidad de país anfitrión, China desea una pronta reanudación de las conversaciones a seis bandas. Un diálogo es mejor que nada, y mejor temprano que tarde", concluyó el canciller chino.