El primer ministro chino, Wen Jiabao, recalcó hoy martes que el gobierno debe adoptar medidas efectivas para prevenir y controlar la contaminación con el objetivo de cumplir las expectativas de la población sobre el disfrute de un buen entorno de vida.
El gobierno debe actuar con decisión para resolver los problemas relacionados con la contaminación del aire, el agua y el suelo que afectan a los intereses fundamentales de la ciudadanía, mejorar la calidad del medio ambiente y salvaguardar la salud del pueblo, señaló Wen al presentar el informe sobre la labor del gobierno ante la primera sesión anual de la XII Asamblea Popular Nacional (APN, máxima legislatura), inaugurada hoy en Beijing.
"Debemos dar esperanzas al pueblo con acciones concretas", dijo el premier dirigiéndose a cerca de 3.000 legisladores en el Gran Palacio del Pueblo, ubicado en el centro de la capital china.
Este informe fue el último que presentará Wen ante la legislatura nacional en calidad de primer ministro, ya que los diputados de la APN elegirán al premier, los vicepremieres y los miembros del nuevo gabinete, así como al presidente y al vicepresidente de China para los próximos cinco años.
El ejecutivo debe intensificar en gran medida la mejora de los ecosistemas y la protección medioambiental, ya que las condiciones del entorno ecológico afectan al bienestar del pueblo y también a la prosperidad y al futuro de la nación, subrayó el premier.
"Tenemos que adherirnos a la política estatal básica de ahorro de recursos y protección medioambiental y esforzarnos por impulsar un desarrollo ecológico, circular y de bajo consumo de carbono", afirmó Wen.
Además, el gobierno debe poner énfasis en la promoción de la conservación y reutilización de la energía y los recursos, priorizar el ahorro energético en sectores como la industria, el transporte, la construcción y las instituciones públicas, y reducir tanto el consumo de energía y materiales como las emisiones de dióxido de carbono, agregó el premier.
Wen subrayó que también es necesario acelerar el reajuste de la estructura y la distribución económica, así como la renovación de los estándares, prácticas, leyes y regulaciones relacionadas.
Hasta el momento, China ha logrado progresos en la conservación energética, la reducción de las emisiones y la protección medioambiental, indica el informe.
Durante los últimos cinco años, China ha cerrado un gran número de instalaciones de producción anticuadas, incluyendo fábricas de hierro, acero y cemento con una capacidad de producción total de 117 millones, 78 millones y 775 millones de toneladas, respectivamente.
Por otra parte, el informe destaca que la capacidad diaria de tratamiento de residuos urbanos del país ha aumentado en 46 millones de toneladas, mientras que el consumo energético por unidad del producto interno bruto (PIB), la demanda total de oxígeno químico y las emisiones de dióxido de azufre han bajado un 17,2, un 15,7 y un 17,5 por ciento, respectivamente. Además, se ha añadido el índice de calidad del aire para la monitorización de las partículas suspendidas en el aire de diámetro igual o inferior a 2,5 micrómetros, más conocidas como PM2,5.
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