Las relaciones entre Brasil y China registran una gran madurez, y el conocimiento profundo de la realidad brasileña que tienen los nuevos líderes chinos, que asumirán en marzo próximo, impulsará aún más la cooperación y los vínculos entre ambos países, destacó hoy el embajador Mauro Brasil de Holanda.
En entrevista con Xinhua, el embajador Brasil de Holanda, director del Departamento de Asia de Itamaraty o la cancillería brasileña, valoró de "muy positiva" la expectativa para el inminente 2013 sobre los vínculos de ambos países.
"El año 2013 marca el inicio de un nuevo ciclo con la asunción en marzo de nuevos líderes en el Ejecutivo en China. Nosotros tenemos una expectativa muy positiva con relación a ese nuevo período", expuso el diplomático.
Añadió que será un año de trabajo "para que nuestras relaciones se intensifiquen".
Entre los hechos relevantes de este año, el diplomático apuntó la realización de la segunda reunión de la Comisión Sino-Brasileña de Alto Nivel de Concertación y Cooperación (COSBAN), que volverá a reunirse en 2013.
La COSBAN permitirá la discusión de las diferentes áreas de cooperación en el marco de la asunción del nuevo presidente de la República Popular de China, Xi Jinping, quien sucederá al presidente Hu Jintao, en marzo.
“Consideramos que las relaciones Brasil-China son muy maduras, y los nuevos líderes chinos tienen un conocimiento muy profundo de la relación con Brasil; entonces no deberá haber ninguna discontinuidad. Pero sería muy importante en el primer año del nuevo liderazgo chino que podamos hacer esa reunión”, señaló Brasil de Holanda.
Subrayó que de los siete miembros del Comité Permanente del Partido Comunista de China (PCCh), tres ya estuvieron en Brasil, entre ellos Xi Jinping, Wang Qishan y Liu Yunshan.
“Eso es una muestra de que ese cambio de liderazgo en nada va a afectar la relación”, subrayó.
En el plano económico, el diplomático puntualizó que en 2012 el comercio bilateral sufrió una ligera caída de 1 por ciento, pero consideró que hay condiciones muy favorables para que haya una recuperación el año próximo.
Reafirmó la intención brasileña de diversificar la pauta exportadora, concentrada en "commodities" (productos básicos), que están muy sujetos a los vaivenes de la economía mundial, por lo que busca incorporar más productos con valor agregado.
Según Brasil de Holanda, el perfil de las relaciones comerciales Brasil-China no está totalmente definido, debido a que aún hay áreas por ser exploradas.
Citó que ambos países carecen de experiencia en la actuación conjunta ante terceros mercados. "No tenemos antecedentes de actuación conjunta de Brasil y China en terceros mercados. Tenemos con Estados Unidos, con Japón, con varios países europeos, pero no tenemos con China", admitió.
Destacó que en el nuevo ciclo de inversiones chinas en Brasil, uno de los elementos importantes es el comercio intrafirma (entre empresas subsidiarias de una misma transnacional), lo que favorece las alianzas económicas.
Expuso que en un primer momento la relación pasaba sobre todo por el comercio, luego se agregaron las inversiones chinas en Brasil, en sectores como petróleo y soya, y ahora "estamos en un tercer momento, con inversiones en el sector industrial".
Refirió que un cuarto paso consiste en "estimular la actuación conjunta de empresas brasileñas y chinas en terceros mercados, con alianzas económicas para actuar en Asia, Europa, en América del Sur. Por eso digo que la silueta, el perfil, no está aún totalmente definido", insistió.
Sobre la creciente importancia de China para los países de Suramérica, el embajador recordó que en la visita del primer ministro Wen Jiabao, en junio, fue realizada una videoconferencia con líderes del Mercado Común del Sur (Mercosur), y emitida una declaración conjunta que establece metas de crecimiento de la inversión y el comercio.
“Consideramos positivo el interés chino con relación a América del Sur y América Latina, sobre todo en un momento de crisis económica y caída de flujos de comercio e inversiones a nivel global", apuntó.
Añadió que "es muy importante que una potencia comercial como China indique su interés en aumentar sus inversiones y comercio con la región”.
Durante la visita del primer ministro Wen Jiabao se acordó el inicio de un proceso de diálogo entre China y América Latina por medio de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
“Creemos que eso es positivo, y que podrá abrir oportunidades de lado a lado. Nosotros esperamos que esas nuevas iniciativas no se traduzcan sólo en avances cuantitativos, sino también cualitativos”, dijo.
Desde el punto de vista brasileño, esos cambios cualitativos comprenderían la alteración de la pauta de exportación, con más productos de valor agregado e inversiones chinas en el campo de infraestructura.
“La presidenta Dilma Rousseff ha estimulado el aumento de la presencia china en proyectos de infraestructura en América del Sur, porque es un área en la que sabemos que tenemos innumerables deficiencias”, indicó.
También, dijo, "esperamos contar con mejores condiciones de acceso al mercado chino en el área de comercio y en el área de inversiones. Algunas dificultades precisan ser superadas”.