El líder del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), Abdullah Ocalan, quien se encuentra encarcelado, pidió hoy a los integrantes de su grupo que depongan las armas y se retiren de Turquía.
"Las armas deben silenciarse y la política debe pasar al frente. Ha llegado el momento en el que nuestras fuerzas armadas deben retirarse más allá de las fronteras", señaló Ocalan en un comunicado, el cual fue leído por Pervin Buldan y Sirri Sureyya Onder, diputados del Partido Paz y Democracia pro kurdo, tanto en kurdo como en turco.
Alrededor de 250.000 personas asistieron a las celebraciones del Newroz en una importante plaza de la provincia de Diyarbakir (sudeste de Turquía), donde escucharon a los diputados kurdos leer la carta de Ocalan.
El festival del Newroz marca el Año Nuevo en Irán, Afganistán, Pakistán, partes de la India y en las áreas kurdas.
El domingo, el ministro turco de Justicia, Sadullah Ergin, declaró en una entrevista televisada que los miembros del PKK saldrían de Turquía en nueve meses a partir del 21 de marzo.
El martes, el primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, señaló que esperaba que el festival del Newroz sea una oportunidad para reanimar el estancado proceso de paz sobre el asunto kurdo y acabar con tres décadas de insurgencia.
"Esperamos que este 21 de marzo se celebre con alegría. Permitamos que el Newroz de este año proporcione esperanza y propague las semillas de la solución", dijo Erdogan.
Las autoridades turcas han realizado negociaciones de paz con Ocalan desde octubre pasado.
El PKK, calificado como una organización terrorista por Turquía y parte de la comunidad internacional, se levantó en armas en 1984 en un intento por crear una patria étnica en el sudeste de Turquía. Desde entonces, han muerto aproximadamente 40.000 personas en los conflictos relacionados con el grupo.