Las relaciones entre Moscú y Washington no volverán a recaer en la etapa de la Guerra Fría, porque los dos países son capaces de resolver varios problemas juntos, dijo el primer ministro ruso, Dmitry Medvedev.
"No existen razones arraigadas y fundamentales para la Guerra Fría. Al contrario, somos capaces de enfrentarnos juntos a una gran variedad de problemas en muchas áreas", dijo Medvedev a la televisión brasileña en una entrevista que se emitirá hoy martes.
En la entrevista, que se llevó a cabo durante su gira por América Latina la semana pasada, Medvedev reconoció que las relaciones entre Rusia y EEUU se han visto perjudicadas por el tema de la adopción de menores y el problema de los misiles de defensa, entre otros.
Medvedev dijo que el responsable de los problemas en los lazos bilaterales es EEUU. "Nos vimos forzados a responder ante esas decisiones".
El primer ministro ruso mencionó el llamado Acto Magnitsky como ejemplo de acciones no amistosas por parte de EUUU, que han provocado represalias por parte de Moscú.
El Acto Magnitsky tiene como objetivo a funcionarios rusos que se cree están involucrados en la muerte de un abogado ruso llamado Sergei Magnitsky durante su detención en 2009. Como respuesta Moscú introdujo el llamado Acto Dima Yakovlev, prohibiendo adopciones de niños rusos por parte de ciudadanos de EEUU.