El primer ministro de Irak, Nuri al-Maliki, pidió hoy a las fuerzas de seguridad del país que enfrenten con flexibilidad a los manifestantes sunitas para frustrar los planes de provocar choques.
En su discruso en una ceremonia en la capital iraquí de Bagdad para conmemorar el 91 aniversario de la fundación de la policía iraquí, Maliki también pidió a las fuerzas de seguridad que pongan énfasis en los principios de derechos humanos y que busquen los mecanismos legales al tratar con los ciudadanos.
También les pidió llevar a cabo sus interrogatorios de los mecanismos legales sin coerción y preservar la dignidad de los detenidos.
Durante dos semanas, miles de iraquíes realizaron manifestaciones antigubernamentales en varias ciudades dominadas por sunitas en protesta por la marginación del gobierno dirigido por chiitas, así como por el supuesto arresto de cientos de sunitas.
Los manifestantes también acusaron a las fuerzas de seguridad dominados por chiitas de arrestar a las mujeres de familias de hombres buscados por las autoridades.