SAN SALVADOR, 30 mar (Xinhua) -- El presidente de El Salvador, Mauricio Funes, solicitó al gobierno de Honduras la desocupación inmediata de la isla Conejo, de conformidad con las normas del derecho internacional, luego de que Tegucigalpa construyó un helipuerto en el islote del Golfo de Fonseca.
"Mi Gobierno solicita al Gobierno de Honduras se abstenga de la realización de estos actos, solicitándole al mismo tiempo la desocupación inmediata de la isla salvadoreña de Conejo, de conformidad a las normas del derecho internacional", indicó el jefe de Estado en una misiva.
Funes envió esa carta al presidente hondureño Juan Orlando Hernández, luego que Tegucigalpa construyó el helipuerto en el islote ubicado en el Golfo de Fonseca, que limita con Nicaragua, Honduras y El Salvador.
"Mi Gobierno le presenta su más enérgica protesta al Gobierno de la República de Honduras por la realización de tales hechos, así como por las declaraciones vertidas en dichas ocasiones", expresó el mandatario salvadoreño en la correspondencia oficial.
El presidente Funes dijo a su homólogo hondureño que "actuaciones como las presentes afectan gravemente las fraternales relaciones que se han mantenido entre ambos Estados".
Hernández sostiene que la isla es suelo hondureño porque es un territorio ocupado desde principios de los años 80.
Durante el inicio de la guerra civil salvadoreña, que ocurrió entre 1980 y 1992, un jefe militar salvadoreño cedió esa zona al control marítimo hondureño para aumentar los patrullajes contra traficantes de armas que podrían enviar pertrechos a la antigua guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), ahora convertido en partido político.
El presidente Funes dijo a la prensa que las autoridades y medios de comunicación de Honduras "tienen más de un año de estar provocando" a El Salvador con el tema de la isla Conejo, pero que no ha aceptado "ningún tipo de provocación".
El mandatario también envió una carta al secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, para expresarle que "lamenta y condena la actitud de provocación que el Gobierno de Honduras realizó recientemente en la isla Conejo, en la que inauguró un helipuerto y otras obras de infraestructura, en clara violación a la soberanía de El Salvador en dicha isla".
En la misiva, firmada por el ministro de Relaciones Exteriores, Jaime Miranda, se expresa que con estas acciones el país vecino están mostrando "de manera irrefutable una actitud expansionista como consecuencia directa de la ocupación militar ilegal de Honduras en la isla Conejo".
Agrega que esto "transgrede el derecho internacional y viola los propósitos y principios establecidos en la Carta de las Naciones Unidas, en particular el respeto de la soberanía de los otros Estados y la solución pacífica de las controversias".
Tegucigalpa celebró su mes cívico en septiembre del año pasado izando la bandera en el islote y hace poco construyó un muelle y un helipuerto para usos militares.
En la zona, los pescadores artesanales sufren sucesivos incidentes con las patrullas navales que resguardan los límites marítimos.
Honduras y El Salvador sufrieron un diferendo limítrofe centenario que los llevó a la Corte Internacional de Justicia (CIJ), con sede en La Haya, para dirimir un problema territorial.
En 1992, la CIJ favoreció a Honduras y El Salvador, el país más pequeño de Centroamérica, perdió territorio en una zona montañosa que es reserva forestal. El fallo también abarcó la zona insular limítrofe sin mencionar la isla de la disputa.