La presidencia de Brasil, Dilma Rousseff, sancionó este lunes el nuevo Estatuto de la Juventud, que establece los derechos de la población joven del país y crea espacios obligatorios para la participación de la juventud en los procesos de decisión nivel federal, estadual y municipal.
El texto establece los principios para el fortalecimiento de las políticas públicas para la juventud, lo que las convierte en políticas de Estado y no de gobiernos.
El Estatuto de la Juventud había sido aprobado por el Congreso el 9 de julio, después de más de nueve años de tramitación, asegurando derechos a la participación social, el territorio, la libre orientación sexual yla sustentabilidad.
Actualmente, la población brasileña entre 15 y 29 años suma 51 millones de personas, según las estimativas oficiales, lo que correponde al mayor número de jóvenes de la historia del país.
En el acto de firma del documento, la presidenta Rousseff señalóque se trata de un "pacto por la juventud brasileña".
"Este pacto, como todos los pactos importantes de este país, estábasado en una visión de que lo que compromete cualquier proceso en Brasil, cualquier iniciativa, es la desigualdad. Es un pacto por la igualdad, por más oportunidades, por garantizar mayor participación y,por lo tanto, un pacto fundado en valores", afirmó.
Dijo que casi todos los jóvenes presentes en la solemnidad nacieron en un Brasil democrático, "un Brasil muy diferente de mi juventud".
"Recibieron un legado de la libertad de expresión, de la libertad de organización, del derecho de huelga, del derecho de opinión, del derecho de manifestación política, de elecciones libres, como resultado de la lucha de varias generaciones que antecedieron a este momento, varias generaciones de jóvenes", agregó.
La mandataria admitió que uno de los problemas más graves de Brasil es la violencia contra jóvenes negros y pobres, pero resaltó que iniciativas como la ley de cuotas raciales en las universidad es parte de la "democratización y el combate al racismo en el país".
En la ceremonia, la presidenta de la Unión Nacional de Estudiantes(UNE), Vic Barros, señaló que el Estatuto representa "la profundización de la democracia por integrar de forma protagónica a la juventud en la sociedad que queremos" y es una respuesta a la masivas manifestaciones ocurridas a partir de junio pasado.
El presidente del Consejo Nacional de la Juventud, Alessandro Belchior, criticó la represión policial en las manifestaciones.
"Ahora las calles piden más, más derechos, más libertad y más democracia. No conseguiremos materializar los derechos de los jóvenes sin hablar en las recientes y violentas represiones", afirmó.
Entre los puntos salientes del Estatuto está la garantía del ingreso a mitad de precio para los jóvenes de bajos ingresos y estudiantes en eventos culturales y deportivos de todo el país.
La regla, sin embargo, no se extiende a los partidos de la Copa del Mundo de Fútbol 2014 ni a las Olimpíadas Rio de Janeiro 2016.
Rousseff vetó también dos puntos que establecían la reducción a la mitad del precio de los pasajes para jóvenes en los viajes de ómnibus interestaduales, y partidas extraordinarias para el transporte público.
Otros derechos reafirmados en la ley son el acceso a la educación,a la profesionalización, el trabajo y la renta para los jóvenes.