Según el informe, cuando la elefanta dio a luz a Zhuang Zhuang y lo pisoteó, los cuidadores pensaron que sólo era un accidente, y cuando el pequeño se recuperó fue llevado de vuelta junto a su madre. ¿Cómo iban a saber que la madre lo atacaría nuevamente? Posteriormente, aunque pudo ser salvado, el pequeño Zhuang Zhuang que había sido abandonado y casi asesinado por su propia madre comenzó a llorar de la tristeza y su llanto continuó durante unas cinco horas.