Cuando termina las prácticas, en su camino a casa, Yaoyao cuenta que siempre pone tanta atención al baile que una sola vez, al ver algunas gotas de sangre en el suelo, se dio cuenta de que sus pies estaban sangrando a causa del roce. Los zapatos de baile están hechos de un material especial que no es apropiado para lavar porque se agrieta con el agua, por lo que quedan todavía en los zapatos de baile tiene algunas manchas de sangres que no ha podido limpiar con servilletas húmedas.