Jia fue recibido por los líderes de la comunidad local china, y subió a bordo del barco en el que se cree que navegó Zheng He, un museo dedicado al almirante y al clan étnico de Fujian en el centro de la ciudad de Malacca, declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco.
"China se ha convertido en un país poderoso y en la segunda economía más grande del mundo, pero prioriza la paz y la amistad con sus aliados", dijo Jia durante la visita.
Jia, que urgió a los chinos de ultramar a trabajar para mantener sus raíces, se encuentra en Malasia después de haber asistido al funeral del Rey Padre Norodom Sihanouk de Camboya.