BEIJING, 1 ene (Xinhua) -- El primer ministro chino, Wen Jiabao, extendió ayer lunes saludos de Año Nuevo a los residentes de una zona de la provincia noroccidental china de Qinghai sacudida hace dos años por un fuerte terremoto y urgió al gobierno local a completar la reconstrucción lo más perfecto posible.
Wen hizo estas declaraciones en Nochevieja al visitar el poblado de Gyegu de la prefectura autónoma tibetana de Yushu, donde más de 2.000 personas perdieron la vida el 14 de abril de 2010 a causa de un seísmo de 7,1 grados en la escala de Richter.
Ésta es la tercera visita de Wen a Yushu desde el terremoto. El premier se desplazó a la prefectura en dos ocasiones poco después del seísmo.
"Al volver a Yushu no lo podía creer. Un Yushu nuevo y prometedor está formándose. El programa de reconstrucción terminará dentro de poco, así que tenemos que rematar las tareas de última hora y completarlo lo más perfecto posible", afirmó Wen.