HEFEI, 14 ago (Xinhua) -- Un hombre oriundo de la provincia oriental china de Anhui ha sido declarado inocente después de cumplir en prisión 17 años de su pena de cadena perpetua por el supuesto asesinato de su esposa.
El Tribunal Popular Superior de Anhui dejó ayer martes en libertad a Yu Yingsheng tras revisar su caso, alegando que en el fallo anterior no quedaban claros los hechos del presunto homicidio y que las pruebas eran insuficientes.
Después de tantos años en prisión, Yu se encuentra en mal estado de salud y ha dejado su casa para recuperarse en otro lugar, reveló a Xinhua una fuente policial. Ni Yu ni sus familiares han querido hacer declaraciones.
La esposa de Yu, Han, fue asesinada el 2 de diciembre de 1996 en su casa en la ciudad de Bengbu. El Tribunal Popular Intermedio del municipio halló culpable a Yu del crimen y le condenó a cadena perpetua. Yu presentó una apelación, pero el Tribunal Popular Superior provincial la desestimó, ratificando el fallo inicial.
No obstante, Yu y su padre continuaron apelando el veredicto desde entonces, hasta que el 31 de mayo de este año, el mismo Tribunal Popular Superior revisó el caso y abrió un nuevo proceso.
Tras conocerse la sentencia, el tribunal informó a Yu de su derecho a solicitar una indemnización estatal y pidió a la policía que buscara al verdadero asesino.
Ayer martes, China publicó por primera vez una serie de directrices para evitar veredictos injustos, erróneos o basados en acusaciones falsas, en respuesta a una serie de escándalos que han salpicado recientemente la imagen de la judicatura del país.
Emitidas por la Comisión de Asuntos Políticos y Jurídicos del Comité Central del Partido Comunista de China, las directrices reiteran principios legales de que la culpa ha de poder establecerse totalmente libre de sospechas y que los jueces, fiscales y efectivos policiales asumen una "responsabilidad de por vida" por su papel en los veredictos injustos, erróneos o falsos.
En uno de los casos más controvertidos, Nie Shubin fue condenado a muerte en 1995 cuando tenía 21 años de edad por haber presuntamente violado y asesinado en 1994 a una mujer en Shijiazhuang, capital de la provincia septentrional de Hebei.
Sin embargo, otro hombre, llamado Wang Shujin, se declaró autor de los hechos después de ser detenido por la policía en 2005 por otros tres cargos separados de violación y homicidio.
El Tribunal Popular Superior de Hebei abrió un nuevo proceso del caso en junio y julio, pero el veredicto aún no se ha anunciado.