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Sistema crediticio mejorado ayuda a impulsar revitalización rural

Actualizado a las 25/09/2018 - 15:37
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ZHENGZHOU, 25 sep (Xinhua) -- El equinoccio de otoño, uno de los 24 términos solares del calendario lunisolar de China, cayó este domingo 23. Para millones de campesinos chinos, el equinoccio de otoño de este año tuvo algo fuera de lo común, ya que incluyó la celebración de la primera Fiesta de la Cosecha, establecida por el Gobierno especialmente para los labriegos del país.

Ahora que ya ha comenzado la temporada de cosecha en las principales zonas de cultivo de cereales del país, Jia Jianyu, un agricultor de 36 años de la provincia central de Henan, dedica todo su tiempo a recoger los melones cuyas semillas plantó meses atrás.

Jia era uno de millones de campesinos que vivían bajo la línea de pobreza en China, pero eso cambió en 2016, cuando empezó a cultivar melones. En su tierra natal, el distrito de Lankao, estas frutas crecen en primavera y otoño.

El total de ingresos de un invernadero destinado a producir melones puede llegar a casi 20.000 yuanes (2.900 dólares). Por eso, para Jia, este negocio tiene el potencial para ayudarlo a salir de la pobreza.

"Yo quería ampliar el área de plantación pero no tenía suficiente dinero", relata Jia.

Pero en ese año, la sucursal del Banco Popular de China (emisor) en esa ciudad estableció el sistema de información crediticia rural, en el que a Jia le fue asignada la categoría de cliente AA.

Con el certificado crediticio "doble AA" en la mano, consiguió un préstamo de 40.000 yuanes de un banco comercial local. Entonces no solo pudo expandir el tamaño de su cultivo, sino que también le alcanzó para comprar un camión.

Tras contratar 18 mu (1,2 hectáreas) de tierra, ahora Jia tiene 13 invernaderos plenos de melones.

El caso de Jia ejemplifica la disposición de los servicios financieros para apoyar a quienes más lo necesitan, en el marco de los esfuerzos del país por erradicar la pobreza para 2020.

Lo más usual en los campos de este país asiático es que los cultivadores recurran a familiares y amigos cuando necesitan dinero, en vista de que la mayoría de ellos no tienen la experiencia de tratar con las instituciones financieras ni tienen una calificación crediticia.

"Como la mayoría de los campesinos no tienen activos cobrables para hipotecar, el personal de los bancos prefiere prestar dinero a las grandes empresas", explica Cheng Guanhua, ejecutivo de la sucursal del banco central de Lankao.

Sin embargo, en los últimos años se ha venido incluyendo una cantidad creciente de información crediticia de los labriegos en la base de datos nacional y en otras plataformas similares. De esta forma, su "valor crediticio" se ha incrementado.

Tomando como ejemplo a Henan, este sistema ha sido utilizado para 173 programas en áreas como lucha contra la pobreza, gobernanza rural y asuntos legales.

Según la sucursal central del Banco Popular de China en Zhengzhou, la capital provincial, desde cuando el sistema empezó a funcionar, en marzo, y hasta julio, se había registrado la información de más de 13 millones de campesinos, lo que equivale al 80 por ciento del total de las familias campesinas de la provincia.

A medida que el país continúa optimizando su sistema de crédito rural, el entorno financiero de las zonas rurales también sigue mejorando.

Según estadísticas del emisor, en el primer semestre de 2018, los préstamos a los pequeños agricultores aumentaron en 87.400 millones de yuanes en comparación con el mismo periodo del año pasado.

La información de crédito cada vez más completa y fidedigna de los campesinos ayudará a canalizar más capital para desarrollar la industria agrícola e impulsar la revitalización rural, de acuerdo con Li Quan, profesor asociado de la Universidad de Lanzhou.

Al repotenciar sus vastas regiones rurales, China espera contar con un sector agrícola fortalecido, un campo hermoso y campesinos acomodados.

Su nuevo poder adquisitivo y las buenas perspectivas de su negocio han puesto a Jia Jianyu a pensar en grande. Por eso, aparte de los 13 invernaderos de melones, ahora está cultivando otros siete mu de maíz y cacahuete.

"Si pago el préstamo a tiempo, mi calificación crediticia se elevará, y así podré obetener también una tasa de interés más favorable", comenta emocionado.  

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