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Lula asegura que se entregará a la justicia de Brasil pues no tiene "miedo"

SAO BERNARDO DO CAMPO, Brasil, 7 abr (Xinhua) -- El ex presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), aseguró hoy que se entregará a la justicia ya que no tiene "miedo" y probará su inocencia, tras ser condenado a 12 años y un mes de prisión y no presentarse ante la policía dentro del plazo establecido, que venció el viernes.

"Atenderé su pedido (entregarse) porque quiero hacer una transferencia de responsabilidad a los que me acusan injustamente", dijo Lula en discurso ante miles de simpatizantes en la sede del Sindicato de los Metalúrgicos del ABC (cinturón industrial de Sao Paulo), en el municipio de Sao Bernardo do Campo, donde empezó su carrera como líder sindical.

El ex presidente brasileño negó que esté huyendo de la justicia por no haberse entregado todavía a la justicia, pese a que el plazo venció ayer a las 17:00 horas (20:00 GMT).

"No estoy escondido, iré allí a la barba de ellos, para que sepan que no tengo miedo, que no correré y para que sepan que probaré mi inocencia", afirmó Lula.

Acompañado de la cúpula del Partido de los Trabajadores (PT), de su ahijada y sucesora en la presidencia, Dilma Rousseff, y de algunos candidatos (de izquierda) a la presidencia brasileña en las elecciones de octubre, Lula reiteró su inocencia y se declaró inocente de las acusaciones contra él.

"Saldré de esta, mayor, más fuerte, más verdadero e inocente, porque quiero probar que ellos cometieron el crimen, contra un hombre que tiene 50 años de historia política. No tengo como pagar la gratitud y el cariño que todos ustedes me han dedicado en todos estos años", dijo.

Además, el ex mandatario aseguró "estar a disposición" de la justicia y de todos los que lo acusan y dijo que "la historia, dentro de algunos días, probará que quien cometió crimen fue el comisario de policía, el juez y el Ministerio Público que me acusaron".

Asimismo, el ex presidente brasileño dijo que si dependiera de él, no se entregaría, pero que sus compañeros y aliados le hicieron ver que no esta no era una buena opción.

"Si dependiera de mi voluntad, no iría (a la policía), pero voy porque si no, dirán que 'Lula está huyendo o Lula está escondido'", abundó.

El líder del PT afirmó que muchas personas le sugirieron que buscara asilo en Uruguay o en embajadas de otros países, pero, según dijo el ex mandatario, ya no tiene edad para ello y prefiere enfrentar a sus oponentes "ojo a ojo".

Además, el ex presidente afirmó que "cuantos más días me dejen en prisión, más 'Lulas' nacerán en el país" y aseguró que no podrán detenerlo porque se ha convertido en una idea.

"Mis ideas estarán en el aire, no hay como detenerlas. Cuando yo pare de soñar, soñaré por sus cabezas. No sirve de nada creer que todo acabará cuando Lula se infarte, mi corazón batirá por sus corazones. Por millones de corazones. No sirve de nada creer que me harán parar, porque no pararé, ya no soy un ser humano, soy una idea, una idea que se mezclará con sus ideas" .

Lula reiteró que es inocente de las acusaciones de haber recibido un apartamento de manos de la constructora OAS a cambio de ayudarla desde el poder.

"Creen que todo lo que sucede en este país es por mi culpa", aseguró.

"Soy el único procesado por un apartamento que no es mío. Los investigadores de la (operación) 'Lava Jato', el Ministerio Público, el juez Moro, todos mintieron diciendo que el apartamento era mío, y me condenaron", afirmó el ex presidente.

"Estoy indignado y no les perdono que hayan pasado la idea a la sociedad que soy un ladrón. Ninguno de ellos duerme con la consciencia tranquila de la honestidad", afirmó Lula.

Asimismo, el ex mandatario brasileño aseveró que "no estoy por encima de la Justicia. Si no creyera en la Justicia, hubiera hecho una revolución, pero creo en la Justicia".

Lula dijo que sus opositores no quieren que se presente a las elecciones de octubre, en las que lidera las encuestas las intenciones de voto.

"No quieren Lula de vuelta, porque los pobres, para ellos (sus opositores), no pueden tener derecho", comentó.

Este sábado, Lula salió por primera vez, desde el pasado jueves, de la sede del Sindicato de los Metalúrgicos, primero para acompañar una misa en homenaje a su difunta mujer, Marisa Letícia, quien hoy cumpliría 67 años, y luego para dar un discurso ante sus simpatizantes.

El juez federal Sergio Moro, responsable en primera instancia de las corruptelas del caso Petrobras, decretó el pasado jueves una orden de prisión contra Lula, condenado en segunda instancia a 12 años y un mes de prisión por corrupción pasiva y lavado de dinero.

Debido a su condición de ex presidente, Moro le concedió a Lula un plazo de 24 horas para que se entregara a la policía, el cual venció el viernes a las 17:00 horas (20:00 GMT), pero Lula optó por no entregarse.

El año pasado, Lula fue condenado por Sergio Moro, responsable en primera instancia del caso Petrobras, a nueve años y medio de prisión por corrupción pasiva y lavado de dinero en el marco de las investigaciones de la trama de corrupción en torno a la petrolera estatal.

Luego de que la defensa del ex mandatario presentó un recurso, el tribunal de apelaciones aumentó la condena contra Lula a finales de enero a 12 años y un mes de prisión.

El pasado jueves, el Supremo Tribunal Federal (STF) desestimó un recurso de "habeas corpus" presentado por la defensa del ex presidente, el cual solicitaba que Lula continuara en libertad mientras se agotan todos los recursos posibles en las instancias superiores.

La negación del recurso de "habeas corpus" ocasionó que el juez Moro emitiera una orden de detención de Lula.

El ex mandatario brasileño está acusado de haber recibido un departamento de la constructora OAS en el litoral del estado de Sao Paulo a cambio de favorecerla en contratos con Petrobras, acusaciones que Lula niega.