BEIJING, 12 mar (Xinhua) - La empresa española Genómica, especializada en equipos de diagnóstico molecular de enfermedades, es la primera del sector de la biotecnología de su país que abre una filial en China, un hito que fue presentado hoy en un acto en la oficina comercial de la embajada española en Beijing al que asistieron representantes de la compañía y potenciales socios locales.
Fundada en 1990 como parte de Zeltia (hoy PharmaMar), una empresa química gallega que empezaba entonces una transición hacia la investigación médica a partir de los recursos marinos, Genómica quiere traer a China, y desde aquí llevar al sudeste asiático, sus equipos para pruebas diagnósticas, que permiten identificar la presencia en el cuerpo del virus del papiloma, herpes, afecciones respiratorias o de transmisión sexual, así como marcadores tumorales del cáncer de pulmón o el melanoma, entre otros.
La sede de la empresa está situada en la Base Bioindustrial Nacional de Wuhan, en la provincia central de Hubei, y se beneficia de las ventajas de la Zona de Libre Comercio de la ciudad, de más de 10 millones de habitantes e importancia económica creciente en el gigante asiático. "Montamos una oficina comercial en 2013 y lo que vimos nos gustó tanto que nos convenció para instalarnos aquí", explicó Rosario Cospedal, consejera delegada de la empresa, quien estuvo acompañada durante la presentación del director de exportaciones, Juan Bataller.
Además del acceso al ingente mercado chino en términos de población, los responsables de Genómica vieron con muy buenos ojos "la disposición de las compañías chinas a innovar" y "el impulso del gobierno a la inversión en el sector", un ímpetu que ha vuelto a quedar patente en el informe sobre la labor del gobierno presentado la semana pasada durante la sesión del legislativo chino.
Genómica está desarrollando ahora una nueva tecnología, denominada Nedxa, con el objetivo de poder realizar diagnósticos muy diversos con una sola muestra, a un coste inferior "entre un 30 y un 40 por ciento" al de otros productos similares y a través de una máquina compacta, cuyas muestras se toman en un recipiente rectangular apenas más grande que una tarjeta de crédito.
La tecnología de esta compañía ibérica ya ha captado el interés de posibles socios chinos, como es el caso de Tigsun, una empresa de Beijing cuyo representante, Hu Duan, se interesó durante el encuentro por las posibilidades de adaptar la oferta de la empresa al mercado chino.
"Somos una empresa tecnológica, si a alguien le interesa, estamos dispuestos a estudiarlo", indicó al respecto Cospedal, que se mostró abierta a desarrollar pruebas para otras enfermedades de mayor prevalencia en el continente asiático.
Aunque la filial estará operativa formalmente a partir del miércoles, Genómica necesita ahora la autorización de la Administración Estatal de Alimentos y Medicamentos para poder comercializar sus productos, un proceso "estricto", en palabras de la responsable. Alejandro Aparicio, representante de la filial china, indicó que el trámite puede tomar un par de años y para que tenga éxito esperan contar con la asistencia de algún socio local.
Sobre la elección de Wuhan como sede, Aparicio mencionó también las buenas conexiones con las metrópolis chinas de Beijing y Shanghai, el futuro enlace con Hong Kong y el tren directo a Europa.