BEIJING, 25 ene (Xinhua) -- Los ingresos fiscales de China crecieron el año pasado un 7,4 por ciento interanual, para situarse en 17,3 billones de yuanes (2,7 billones de dólares), como resultado de un crecimiento económico más rápido de lo esperado, según datos oficiales dados a conocer hoy jueves por el Ministerio de Hacienda.
El incremento fue notoriamente superior a la subida del 4,5 por ciento registrada en 2016, de acuerdo con la misma fuente.
El gobierno central recaudó más de 8,1 billones de yuanes en ingresos fiscales, un ascenso interanual del 7,1 por ciento, mientras los de los gobiernos locales registraron un crecimiento del 7,7 por ciento, con lo que llegaron a 9,1 billones de yuanes.
La cartera atribuyó el rápido crecimiento al mejoramiento de la economía nacional, el aumento de los precios industriales, la efectividad de las reformas estructurales por el lado de la oferta y otras políticas de apoyo.
La economía china experimentó un aumento del 6,9 por ciento en 2017, su primera aceleración desde 2011.
Con una base firme para su economía y un crecimiento de los ingresos fiscales, los economistas creen que China mantendrá sus esfuerzos por reducir los impuestos para bajar los costos comerciales y mantener el ímpetu de la recuperación económica.
El año pasado, los gastos fiscales del país subieron un 7,7 por ciento anual hasta los 20,3 billones de yuanes. Los gastos en proyectos de ahorro de energía ascendieron un 19,8 por ciento, para situarse en 567.200 millones de yuanes.
China prometió mantener una política fiscal proactiva en 2018.