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Una unidad militar impecable protege el corazón de la república

Una unidad de la Policía Armada Popular de China patrulla la Plaza Tian'anmen, el 15 de marzo. [Foto provista al China Daily]

Beijing,23/11/2017(El Pueblo en Línea)-Como comisario político del décimo destacamento de la división de Beijing de la Fuerza de Policía Armada Popular de China, Wang Jianhua es plenamente consciente de la importancia de su trabajo.

Está a cargo de la seguridad alrededor de la Plaza Tian'anmen, la plaza más grande del mundo y el centro geográfico y simbólico de Beijing. La seguridad de la Plaza Tian'anmen, el Museo del Palacio y el Museo Nacional son responsabilidad de su destacamento.

"La Plaza de Tian'anmen es un lugar de suma importancia debido a su importancia política. Esto plantea un tremendo desafío para nuestro trabajo", dijo Wang. "Su seguridad tiene una gran importancia simbólica para la estabilidad nacional".

El destacamento de Wang tiene todas las razones para estar en alerta máxima. La Plaza Tian'anmen ha sido escenario de muchos eventos importantes en la historia de China, incluida la fundación de la República. Desde la década de 1980, más de 300 millones de personas han acudido a la plaza para presenciar la ceremonia de izamiento de la bandera.

En las paredes del dormitorio de la Guardia de la Bandera Nacional, la unidad del décimo destacamento responsable de escoltar, levantar y defender la bandera nacional de China en la plaza, cuelga una pancarta que dice: "Fuera de esta puerta se ecuentra el puesto de vigilancia nro 1 de nuestra patria."

El puesto de vigilancia nro 1 de China exige una fuerza policial armada de primer nivel, y el destacamento no defrauda. La competición de capacidad de combate de este año fue la ganó su escuadrón de operaciones especiales. Este grupo ha contribuido al éxito de acontecimientos políticos de primera categoría, incluidos los congresos nacionales del Partido Comunista de China, las sesiones anuales de la Asamblea Popular Nacional y las visitas de líderes extranjeros.

Un nuevo soldado asignado a la Guardia de la Bandera Nacional tiene que marchar decenas de miles de pasos todos los días. Después de dos años de entrenamiento, habrá recorrido más de 13.000 kilómetros en promedio.

La zona que rodea la Plaza de Tian'anmen y el Museo del Palacio es el hogar de algunas de las arquitecturas más famosas de Beijing. La construcción de nuevos edificios generalmente no está permitida, por lo que el destacamento tiene que conformarse con vivir en los antiguos.

"Nuestros dormitorios pueden no ser los mejores, pero nuestra moral no tiene rival", dijo Du Zeheng, jefe de logística del destacamento.

El destacamento está constantemente en el ojo público.

"La gente ve la imagen de todo el ejército chino en nosotros, así que siempre mantenemos nuestras botas muy pulidas y nuestros uniformes impecables", dijo Zhang Haizhou, un líder de escuadrón. "A veces los turistas y sus hijos nos saludan. Eso siempre nos enorgullece".

Zhang recordó a un policía de Australia que pidió una fotografía con él mientras estaba de servicio. Después de que Zhang le dijera que era contrario a las regulaciones, el policía lo elogió por su sentido del deber.

En casos de reuniones internacionales importantes, como el Foro de Cooperación Internacional “Cinturón y Ruta”, los soldados fueron los guardianes de los invitados. Aquellos con mejor inglés ayudaron a los que hablaban un idioma más básico para que aprendan conversaciones básicas.

"Los soldados más nuevos generalmente tienen una mejor educación y son mejores en inglés", dijo LiuYu, de 23 años, quien obtuvo 130 puntos de 150 en la parte de idioma inglés del examen de ingreso a la universidad pública de China antes de unirse al ejército.

"Lo que es interesante es cuando los extranjeros intentan hablar con nosotros en un chino básico", dijo Liu.