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Presidente egipcio descarta modificar límite de dos períodos presidenciales

EL CAIRO, 7 nov (Xinhua) -- El presidente de Egipto, Abdel-Fattah al-Sisi, señaló que no modificará el límite constitucional de dos períodos presidenciales de cuatro años, por lo que descarta un tercer período para sí mismo.

El presidente hizo la promesa en una entrevista transmitida el lunes por la cadena de televisión estadounidense CNBC.

Al-Sisi, ex jefe militar que depuso a su predecesor islamista Mohamed Morsi en 2013 y que fue elegido presidente un año después, dijo que las elecciones presidenciales de 2018 se realizarán en marzo o abril conforme a lo previsto.

"Estoy a favor de conservar dos períodos presidenciales, de cuatro años cada uno, y no apoyó modificaciones a este sistema. Ahora tenemos una nueva Constitución y no busco ninguna enmienda constitucional en este período", dijo Al-Sisi.

Al-Sisi no ha anunciado de manera oficial que competirá por un segundo período presidencial, pero se espera que lo haga y que consiga una victoria aplastante por la ausencia de verdaderos contendientes.

Algunos legisladores y personajes independientes también emprendieron una campaña nacional de petición para pedir a Al-Sisi que vuelva a competir por la presidencia. Hasta ahora han recabado alrededor de tres millones de firmas.

"La Constitución otorga al Parlamento y al presidente el derecho de buscar enmiendas, pero no estoy hablando de períodos presidenciales, no buscaremos intervenir. Por consiguiente, ningún presidente puede quedarse en el poder más allá de los períodos previstos en la Constitución y la ley", dijo Al-Sisi.

"No me corresponde como presidente quedarme ningún día más en contra de la voluntad de los egipcios. Son principios que abrazo y defiendo", añadió.

Por otra parte, el abogado egipcio opositor Khaled Ali anunció el lunes su intención de competir por la presidencia en las elecciones de 2018.

Ali recibió una condena en suspenso de tres meses de prisión en septiembre por hacer una señal obscena tras ganar una orden judicial para desafiar al gobierno.