Los minikaraokes chinos logran escalar el estrellato
Beijing, 02/08/2017 (El Pueblo en Línea) - En China, los minikaraokes -también conocidos como cabinas KTV- han logrado sumar a miles de seguidores en todo el país.
La pequeña cabina insonorizada de un minikaraoke está equipada con aire acondicionado, pantalla de video y reproductor KTV, un par de banquetas y un par de auriculares.
Usted paga una cuota, se pone los audífonos, corre la cortina y comienza a cantar a todo pulmón. Además, puedes compartir la experiencia a distancia con tus amigos o grupos de interés, vía internet a través de las redes sociales.
En China, los nuevos minikaraokes se encuentran por todas partes: en los centros comerciales, en los vestíbulo de los cines, en las estaciones de metro. Mantienen la función del karaoke tradicional y ofrecen un ambiente más íntimo, novedoso y casual.
"No importa lo bueno o malo que canto. Aquí nadie va a juzgarme. Puedo vivir mi propio concierto y en cualquier momento", asegura Li Rui, residente en la ciudad de Changchun, capital de la provincia de Jilin.
Li añadió que para los KTV tradicionales hay que reservar habitaciones por adelantado y siempre hay "cargos adicionales" que abonar como la compra de bebidas y frutas.
De acuerdo a la compañía de investigación iMedia, el valor de mercado de los minikaraoke alcanzará este año los 3.180 millones de renminbi (473 millones de dólares), lo que representa casi el doble del año pasado. Además, se espera que el año entrante el mercado se duplique.
Para muchos jóvenes que viven en las ciudades chinas, cantar es una de las maneras más eficientes de aliviar el estrés cotidiano.
"En el pasado, organizar una fiesta en un KTV significaba tener que pagar el consumo de un grupo grande de invitados, hacer coincidir la agenda de todos para determinar fecha, hora y lugar.. y además tener suerte y poder reservar una habitación KTV, lo cual nunca es tarea fácil", recuerda Ma Yan, aficionado al canto estilo KTV. "Ahora con los minikaraokes todo es más sencillo."