Por Zhao Hui, Chen Yin y Zhu Wanjun
BEIJING, 13 jun (Xinhua) -- China y Panamá firmaron el martes un comunicado conjunto sobre el establecimiento de relaciones diplomáticas, convirtiéndose el último en el segundo país centroamericano que tiene lazos diplomáticos con la República Popular China, después de Costa Rica.
Al mismo tiempo, Panamá rompe sus "relaciones diplomáticas" con Taiwan, isla que China considera parte inalienable de su territorio, y promete no mantener ningún contacto ni intercambio oficial con ella.
El presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, confirmó la noticia en su cuenta de Twitter y justificó que China "es el segundo usuario más importante del Canal y además es el primer proveedor de mercancías de la Zona Libre de Colón".
A ojos del investigador del Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Academia de Ciencias Sociales de China Yuan Dongzhen, el establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y Panamá es "algo natural".
"Muchos países, incluidos los latinoamericanos, han mostrado gran interés en las iniciativas chinas como la de la Franja y la Ruta, pero es inimaginable que logren intensificar la cooperación con China y se beneficien de ella sin la normalización de las relaciones diplomáticas", recalcó.
En el caso de Panamá, la mayor ventaja directa que podrá disfrutar es la contribución china a su economía.
"A medida que las relaciones bilaterales se vuelvan más amplias e integrales, Panamá va a sacar más beneficios económicos de la cooperación bilateral, gracias al aumento de las exportaciones a China y de que las inversiones chinas tendrán mayor confianza en un país con el que existen lazos diplomáticos", explicó.
Según el pronóstico de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), la economía de Centroamérica crecerá un 3,7 por ciento en 2017, mostrando poca variación frente a la cifra registrada en 2016, pero por debajo de la cifra de 2015, cuando alcanzó un 4,7 por ciento.
En su informe anual "Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe 2016", el organismo de la ONU advirtió que las tendencias proteccionistas surgidas en Estados Unidos podrían poner en riesgo los acuerdo comerciales que actualmente benefician a los países centroamericanos.
El Banco Mundial también indicó en su último informe "Perspectivas Económicas Mundiales", publicado el presente mes, que Centroamérica, que tiene nexos comerciales muy estrechos con Estados Unidos y México, podría sufrir una disminución de las exportaciones debido a las medidas proteccionistas aplicadas por el gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump.
Por otra parte, Estados Unidos ha apostado por una política de inmigración muy estricta que supone una reducción notable de las remesas que provienen del país norteamericano y, como resultado, una merma del consumo y la inversión privada, según el documento.
Marisol Argueta de Barillas, directora del Foro Económico Mundial para América Latina, destacó la importancia de China para el desarrollo de la región, y las oportunidades de cooperación entre ambas partes.
"La influencia de China y sus relaciones son cada vez más fuertes con América Latina. China ya dejó de ser solamente un comprador de materias primas y se ha convertido en un inversor importante en América Latina", enfatizó la especialista.
Actualmente, China es el segundo socio comercial y una importante fuente de inversión de América Latina y el Caribe, y ha propuesto elevar el comercio bilateral hasta 500.000 millones de dólares y destinar a la región 250.000 millones de dólares en diez años.
Por otro lado, el inmenso mercado chino representa una gran atracción para los países latinoamericanos y caribeños. En los próximos cinco años, China importará bienes y servicios por valor de 10 billones de dólares e invertirá 500.000 millones de dólares en el extranjero, mientras los turistas chinos realizarán más de 500 millones de visitas a otros países.
Sin embargo, Centroamérica tiene sus particularidades. En comparación con otras subregiones de América Latina, la mayoría de los países centroamericanos tienen como tarea pendiente establecer relaciones diplomáticas con China para así poder incrementar la cooperación bilateral.
De los siete países centroamericanos, cinco siguen manteniendo supuestos "vínculos diplomáticos" con Taiwan, excepto Panamá y Costa Rica, país este último que rompió los lazos oficiales con Taiwan en 2007.
Tras reanudar las relaciones diplomáticas con China, Costa Rica se ha convertido en un importante socio de China en América Latina. En 2011, ambas naciones rubricaron un acuerdo de libre comercio, mediante el cual China ha pasado a ser el segundo socio comercial del país centroamericano.
En materia de asistencia gratuita, China ha financiado la construcción del Estadio Nacional y la Escuela Nacional de Policía, los mejor equipados en toda Centroamérica.
Además, la empresa China Harbour Engineering Company Limited está modernizando la Ruta 32, que une la capital nacional de San José con la provincia de Limón, lugar que alberga los principales puertos comerciales y petroleros del país.
Este proyecto, que tendrá un costo de 485 millones de dólares y será financiado en un 85 por ciento con un préstamo otorgado por China, se espera que cree por lo menos 1.000 empleos directos y 10.000 indirectos.
He Xi, investigador adjunto de la Escuela de Relaciones Internacionales de la Universidad Sun Yat-sen, consideró que las buenas relaciones que mantienen China y Costa Rica en diversos terrenos han servido como "ejemplo muy convincente" para Panamá, que también podrá disfrutar en el futuro del fortalecimiento de la cooperación bilateral.
"Existe un amplio espacio para la cooperación bilateral en ámbitos como la transportación marítima, los servicios financieros, las telecomunicaciones y la infraestructura. China tiene un inmenso mercado y una fuerte capacidad de inversión, lo cual traerá más beneficios al pueblo panameño", acotó.
A su vez, Wang Peng, investigador adjunto del Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Academia de Ciencias Sociales de China, aseguró que toda Centroamérica también podría beneficiarse del acercamiento entre China y Panamá, pues este último es una vía por la que muchas empresas chinas podrán expandirse en la subregión y contribuir al desarrollo mutuo.
"China puede participar más activamente en el sector financiero de Panamá, que es muy competitivo a nivel regional, y de esta manera promover el desarrollo comercial y financiero entre China y Centroamérica, incluso entre China y el hemisferio occidental", destacó.