BRASILIA, 28 mar (Xinhua) -- La Unión Europea (UE) quiere información detallada de la operación Carne Débil en Brasil, la cual evidenció fraudes en la industria frigorífica, y garantías de que la carne exportada y sus derivados no representan una amenaza para la salud del consumidor.
El comisario de Salud y Seguridad Alimentaria de la UE, Vitenis Andriukaitis, se reunió este martes con el ministro brasileño de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento, Blairo Maggi, a quien informó que parte de los 27 miembros del bloque europeo exige una actitud más dura hacia el país sudamericano.
"Me dijo que hay una presión muy fuerte de los países que quieren una actitud más dura por parte de la Comunidad Europea", explicó el ministro brasileño.
En conjunto, los 27 países de la UE representan el mayor consumidor de mercado de la carne brasileña después de China.
Calificada de la operación más grande en la historia de la Policía Federal (PF) de Brasil, la operación Carne Débil mostró el pasado 17 de marzo que las oficinas regionales del Ministerio de Pesca y del Ministerio de Agricultura de Paraná, Minas Gerais y Goiás protegieron a grupos empresariales en perjuicio del consumidor.
Después de dos años de investigación se detectaron irregularidades como el reenvasado de productos caducados y venta de carne no apta para la alimentación.
El viernes pasado, la UE anunció la devolución de la carne brasileña procedente de 21 establecimientos frigoríficos investigados y la suspensión de las compras de esos productos.
Según Maggi, Andriukaitis sugirió que el sistema de control sanitario de Brasil se someta a una auditoría externa, a lo cual el ministro no presentó objeciones.
"El anuncio de la operación de la PF contaminó todo el proceso de información en Brasil y en el extranjero. Consumidores externos también están pensando en carne de cartón, en carcinógenos (cancerígenos), en fin, que no tenemos ningún control sobre el proceso de producción", explicó.
Una nueva reunión está prevista para el próximo jueves, cuando Maggi entregará a Andriukaitis y su equipo documentos que detallan el progreso de las investigaciones, inspecciones y pruebas de laboratorio realizadas por el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento, así como toda la información proporcionada por las empresas bajo sospecha.
"Estos son los datos que ya están colocados allí, ya está disponible para otros países y en nuestra página 'web' (de internet). Vamos a ofrecer todo en detalle para que tengan el sentido de responsabilidad de cada uno y hasta dónde han llegado las investigaciones", explicó el brasileño.
A partir de los acontecimientos de los últimos días, la industria frigorífica se comprometió a revertir el daño a la imagen de la carne brasileña.
"La recuperación de la confianza en el sistema brasileño demora. No se hace por decreto. El gobierno tendrá que hablar y estar presente en muchos de estos países para, junto con el sector privado, mostrar que los productos brasileños son de buena calidad", agregó.