Por Bao Daozu
Economistas chinos instan a acelerar el ritmo de las reformas
Pekín, 27/10/2015(El Pueblo en Línea)-Las "barreras institucionales" son el principal factor que obstaculiza el progreso de la nación, afirmó uno de los principales economistas de China en un enérgico llamamiento para que los dirigentes del país aceleren las reformas que se han retrasado. Las palabras de Wu Jinglian llegan como un adelanto antes de la reunión de alto nivel que está prevista para el lunes donde se delineará el programa de desarrollo del país para los próximos cinco años.
El Partido Comunista de China celebrará su pleno del Comité Central del que saldrá una propuesta para el 13 Plan Quinquenal (2016-20). La reunión servirá también para llenar las vacantes de alto nivel dejada por los funcionarios que enfrentan cargos legales, incluyendo 11 ex miembros del Comité Central y miembros suplentes.
Wu, experto del Centro de Investigación de Desarrollo del Consejo de Estado y experimentado asesor económico del gobierno central desde los primeros días de la reforma económica de la nación.
Hablando el domingo en un centro para el Desarrollo Industrial y el Foro de la Gobernanza Ambiental de la Universidad Tsinghua, Wu culpó a lo que él llama "barreras institucionales" como el principal factor de la desaceleración en China y la incapacidad para satisfacer las demandas de sus nuevos ciudadanos de clase media. "La única solución es seguir adelante con la reforma, en lugar de introducir continuas medidas de estímulo financiero", precisó.
También criticó el intento de utilizar ese tipo de medidas para aumentar la velocidad de crecimiento, siendo el camino equivocado para aliviar los problemas económicos de la nación. En algunas áreas clave, las reformas para eliminar las barreras institucionales han sido más lentas de lo que deberían, a pesar de la firme determinación del gobierno, expresada en programas aprobados desde el 2012, agregó Wu. Uno de los aspectos es la reforma del mercado de capitales y su supervisión.
En la gestión fiscal del gobierno persisten otros muchos problemas, "porque demasiada deuda se contrajo a partir de los programas de estímulo financiero del gobierno después de la crisis financiera mundial de 2008", detalla Wu.
El efecto de las medidas de estímulo financiero han caído en un grado tal que resultan casi inútiles ahora, ya que los gobiernos locales y las empresas han incurrido en una enorme deuda. La introducción de este tipo de medidas para la economía es una solución equivocada e insostenible para China, añadió Wu.
En cambio, afirmó que hay que concentrarse en la reforma del sistema financiero, la gestión fiscal, los precios y los sistema de fijación de precios, en las empresas estatales, la creación de zonas libres de aranceles y ofrecer mayor apertura a los inversores internacionales.
Por su parte, Chen Qinghai, ex decano de la Universidad de Tsinghua de la Escuela de Economía y Administración, destacó en el mismo foro que será grande el desafío ambiental.
La semana pasada, Ma Jun, economista jefe del Banco Popular de China, señaló que la futura reforma financiera se centrará en la financiación general, la financiación de la innovación, Internet y el medioambiente.