Xu Shicheng:No culpemos con encono al gobierno mexicano

Actualizado a las 10/11/2014 - 15:59

Palabras clave：ferrocarril,México,CRCC

Por Xu Shicheng

Pekín, 10/11/2014 (Pueblo en Línea)-Repentinamente, el gobierno mexicano anunció la revocación del proyecto de ferrocarril de alta velocidad que fuera otorgado, mediante licitación, a la Corporación de Construcción de Ferrocarriles de China (CRCC, por sus siglas en inglés). En China, este asunto ha repercutido bastante. Junto a la sorpresa inicial, muchas personas han expresado consternación y preocupación por el repentino paso atrás del gobierno mexicano, mientras los medios occidentales se alegran del mal ajeno y le prenden fuego al asunto.

De hecho, la anulación del proyecto de construcción del ferrocarril de alta velocidad otorgado a CRCC no es una completa responsabilidad del gobierno mexicano. En gran medida, se debe a la compleja situación político-social que atraviesa México. Esta realidad, sin dudas, es un impedimento para la ágil y determinada materialización de este proyecto.

Las dudas expresadas por el principal partido de oposición han sido la razón primordial por la cual el gobierno mexicano cambió de actitud. Desde el inicio de la licitación, la oposición política mexicana y la prensa han fijado sus ojos en este tema. El punto de conflicto se centra en el tiempo exigido para presentar la licitación y en la cualificación del socio mexicano que acompaña a CRCC. La oposición y la prensa sospechan que dichas empresas tienen estrechas relaciones con el partido gobernante. De acuerdo con las afirmaciones del estudioso mexicano Oropesa, hay muchas posibilidades que los principales funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes hayan favorecido esta licitación.

Por otro lado, el presidente mexicano Enrique Peña Nieto se enfrenta con una enorme presión en su gestión al frente del gobierno, que no está motivada por el proyecto del ferrocarril de alta velocidad, sino por los "sucesos de Iguala", que han generado una alarma y un repudio general, dentro y fuera de México. Las olas de protestas se han extendido a lo largo del país y han provocado serios disturbios. El Partido Revolucionario Institucional, donde milita Peña Nieto, tiene que encarar los hechos y solucionar los problemas derivados del fatídico suceso. En este momento, si se vuelve a cuestionar la legitimidad del ferrocarril de alta velocidad como tema destacado, se adicionaría otra piedra en el zapato, lo que agravaría la ya compleja situación interna.

Como sombra detrás de la revocación del gobierno mexicano al otorgamiento de la ejecución del proyecto a CCRC, no podemos eliminar la posibilidad de que la competencia empresarial foránea y los Estados Unidos hayan jugado una mala pasada. Aunque ahora lo evidente para hacer detonar la revocación es la urgencia de bajar el tono a la crisis interna y neutralizar, por el momento, otras probables diatribas.

Esta "marcha atrás" ha impactado un tanto negativamente en las relaciones entre China y México y ha causado enormes pérdidas económicas a las compañías chinas. También ha frenado el entusiasmo de las empresas chinas por invertir y participar en proyectos dentro del territorio mexicano. CCRC declaró que "emprenderá, si es necesario, acciones legales para proteger sus intereses " debido a la súbita decisión de revocar el otorgamiento.

Pero una mancha no puede oscurecer el esplendor del jade. Seguiremos manteniendo buenas relaciones de amistad con el gobierno de Enrique Peña Nieto. Durante los últimos dos años, Peña Nieto ha concedido una gran importancia a la cooperación y vínculos con nuestro país. El presidente Peña Nieto visitó China inmediato a su elección. El año pasado atendió la visita del presidente Xi Jinping y firmó una serie de acuerdos de cooperación bilateral. Mientras tanto, los dos presidentes anunciaron conjuntamente que las relaciones sino-mexicanas pasaron a ser una asociación estratégica integral. A pesar de los recientes disturbios y alteraciones de la situación social en México, el presidente Peña Nieto mantuvo la decisión de visitar nuevamente nuestro país y participar en la reunión de la APEC. Este gesto lo apreciamos profundamente.

CRCC puede seguir optando por obtener el contrato. Aunque no debemos culpar al gobierno mexicano, sí tenemos que reafirmar nuestra posición, declarando que la compañía china ha seguido estrictamente los procedimientos y requisitos de la licitación pública y el contenido de la misma cumplió con los requisitos exigidos por el gobierno mexicano. Esperamos que el gobierno de México pueda mantener un entorno de competencia justa para las empresas chinas, a fin de no dañar el saludable clima de inversión. Mientras tanto, China debe mantener la relación de amistad con México. Seguir expandiendo la cooperación amistosa y la asociación estratégica integral. Y continuar desarrollando las relaciones económicas y comerciales.

(El autor es el vice-presidente de la Asociación China de Estudios Latinoamericanos )