El primer centro británico de tratamiento del ébola fue inaugurado hoy en Sierra Leona, anunció el Departamento de Desarrollo Internacional de Reino Unido.
El centro de tratamiento se ubica en la localidad de Kerry, cerca de Freetown, capital de Sierra Leona.
El complejo de la localidad de Kerry incluye un centro de tratamiento de 80 camas que será operado por la organización no gubernamental Save the Children (Salvemos a los niños) y un centro de 12 camas dotado con médicos del ejército británico específicamente para trabajadores médicos y personal internacional que participa en la respuesta a la crisis del ébola.
"Este centro de tratamiento, el primero de seis centros que serán construidos por Reino Unido, dará a los pacientes el cuidado que necesitan para combatir el ébola, lo que limitará la propagación de esta terrible enfermedad", dijo Justine Greening, secretaria de Desarrollo Internacional de Reino Unido.
La construcción del centro de tratamiento fue financiada por el Departamento de Desarrollo Internacional y diseñada y supervisada por los ingenieros del real ejército británico. El lugar también alberga un laboratorio de pruebas para detectar el ébola operado por científicos británicos para diagnosticar pacientes, informó el departamento.
El departamento señaló que Save the Chilren está reclutando a más de 200 trabajadores médicos y mucho más personal de apoyo para ayudar a poner en marcha el centro de tratamiento de la localidad de Kerry.
La capacidad total del centro de 80 camas será alcanzada de forma gradual en las próximas semanas, lo que dará al personal tiempo para garantizar un ambiente seguro para los pacientes y el personal y para reducir el riesgo de contagio.
El centro de 12 camas, el cual será ampliado a 20 camas 60 días más tarde, será dotado de médicos del 22º Hospital Militar de Campaña del ejército británico durante los primeros cuatro meses de operación.
Ya comenzó la construcción de los otros cinco centros de tratamiento. Una vez construidas, estas instalaciones elevarán el número de camas apoyadas por los británicos a más de 700 y permitirán ofrecer atención médica directa a hasta 8.800 pacientes en seis meses, indicó el departamento.