ACCRA, 18 sep (Xinhua) -- Para finales del próximo año, los tres países más afectados por el ébola en el oeste de África habrán perdido cerca de 809 millones de dólares en sus economías, pronosticó el Banco Mundial.
Estas pérdidas pronosticadas constituirán el impacto de mediano plazo del brote de la enfermedad del virus del Ébola en Liberia, Sierra Leona y Guinea.
En una declaración de la oficina del Banco Mundial en Ghana, responsable de Sierra Leona y Liberia, se concluyó que "si el virus continúa propagándose en los tres países más afectados, Liberia, Sierra Leona y Guinea, su impacto económico podría aumentar ocho veces".
El Banco Mundial indicó que esto "asestaría un golpe posiblemente catastrófico a los ya frágiles Estados".
En cuanto a Guinea, el Banco Mundial señaló que el impacto de corto plazo de esta enfermedad será una pérdida de 130 millones de dólares, o 2,2 por ciento del producto interno bruto (PIB) total de este país en 2014.
A mediano plazo, con una baja incidencia del ébola, habría una pérdida de 43 millones de dólares, o 1,0 por ciento del PIB en 2015, mientras que una alta incidencia de ébola costaría a este país 142 millones de dólares, o 2,3 por ciento del PIB.
El análisis encontró que el brote de la enfermedad afectará de forma diversa la producción económica de los tres principales países afectados.
"La inflación y los precios de los alimentos estuvieron contenidos en un principio, pero ahora están elevándose en respuesta a la escasez, las compras de pánico y la especulación", agregó el Banco Mundial.
El Banco Mundial indicó que las familias ya vulnerables a las variaciones en el precio de los alimentos han quedado cada vez más expuestas. La volatilidad del tipo de cambio ha aumentado en los tres países, en particular desde junio, debido a la incertidumbre y la fuga de algunos capitales.
"El análisis encontró que los efectos económicos más graves de la crisis no son resultado de los costos directos (mortalidad, morbilidad, atención médica y pérdidas asociadas con los días laborales), sino de los derivados del comportamiento de aversión impulsado por el temor al contagio", añadió el Banco Mundial.
De acuerdo con el Banco Mundial, esto a su vez conducirá al temor de asociarse con otras personas y reducirá la participación de la fuerza laboral, cerrará algunos lugares de trabajo, interrumpirá el transporte y motivará a algunos encargados de la toma de decisiones del gobierno y del sector privado a cerrar puertos y aeropuertos.
El documento indica que en la historia reciente de los brotes de enfermedades contagiosas, como la epidemia de SARS de 2002-2004 y la epidemia de gripe H1N1 de 2009, los efectos de comportamiento han sido los responsables de entre 80 y 90 por ciento del impacto económico total de las epidemias.
"Las conclusiones del análisis destacan la necesidad de una respuesta internacional conjunta. El financiamiento externo es claramente necesario en los tres principales países", resaltó el Banco Mundial
"Las estimaciones del impacto indican que los gastos de contención y mitigación son de varios miles de millones de dólares que serán efectivos en térimos de costo si evitan de forma exitosa el peor escenario", dijo el Banco Mundial.