Fuente: Agencias
Tras casi una década de meticulosas observaciones, un equipo internacional de astrónomos ha medido, con mayor precisión que nunca, la distancia a nuestra galaxia vecina, la Gran Nube de Magallanes, y resulta que se encuentra a 163.000 años luz.
Estas nuevas medidas también amplían nuestro conocimiento sobre la tasa de expansión del Universo, y es un paso adelante crucial para entender la naturaleza de la misteriosa energía oscura que hace que la expansión se esté acelerando. La investigación, que aparece publicada en la revista Nature, fue realizada con telescopios del Observatorio La Silla del Observatorio Europeo Austral (ESO), en Chile, además de otros telescopios alrededor del mundo.
Para conocer con exactitud distancias cada vez más alejadas en el Cosmos, los astrónomos utilizan su propia «cinta métrica». Primero, miden la distancia a objetos cercanos, utilizándolos como puntos de referencia. Dado que las estrellas en esta galaxia se utilizan para fijar la escala de distancias para galaxias más remotas, las medidas son de crucial importancia.