Clinton defiende ante Congreso manejo de ataque en Benghazi

  2013:01:24.10:49

La secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, dijo hoy en una audiencia ante el Congreso que asume la responsabilidad por el fracaso en la seguridad en el ataque contra el consulado estadounidense en Benghazi, Libia. Sin embargo, defendió con vehemencia el manejo de la administración Obama en relación con las consecuencias del ataque.

"Como lo he señalado en muchas ocasiones desde el 11 de septiembre, asumo la responsabilidad", dijo Clinton antes de la audiencia realizada por el Comité de Relaciones Exteriores del Senado. Es probable que esta sea una de sus últimas comparecencias ante el Congreso antes de renunciar al cargo de secretaria de Estado.

"Nadie está más comprometido con hacer esto bien. Estoy decidida a hacer que el Departamento de Estado y nuestro país sean más seguros y más fuertes", dijo Clinton.

El letal ataque del 11 de septiembre en la ciudad oriental libia de Benghazi ocurrido el año pasado provocó la muerte del embajador estadounidense en Libia, Christopher Stevens, y de otros tres estadounidenses. El Departamento de Estado de Estados Unidos ha sido criticado con dureza por la inadecuada protección de la misión estadounidense.

El 18 de diciembre, la Junta de Revisión y Rendición de Cuentas (ARB, por sus siglas en inglés) publicó una revisión sobre el ataque en Benghazi y señaló que "deficiencias de manejo" en altos niveles del Departamento de Estado contribuyeron al letal resultado.

Tras el informe, cuatro funcionarios del Departamento de Estado fueron destituidos, incluyendo a Eric Boswell, secretario asistente de Estado para seguridad diplomática.

Ante las preguntas de los senadores, Clinton defendió con vehemencia a la administración de las acusaciones en el sentido de que intentó encubrir la verdad alrededor del ataque.

"Con el debido respeto, el hecho es que tuvimos cuatro estadounidenses muertos. ¿Se debió a una protesta o a que unos tipos salieron a caminar por la noche y decidieron asesinar a algunos estadounidenses? ¿Cuál es la diferencia?", respondió Clinton molesta y golpeó la mesa con el puño por la repetida presión del senador republicano Ron Johnson.

"Es nuestro trabajo aclarar qué ocurrió y hacer todo lo posible para evitar que vuelva a ocurrir, senador", dijo Clinton.

Cinco días después del ataque, la embajadora estadounidense ante la ONU, Susan Rice, apareció en varios programas de televisión nacional y describió el ataque como un incidente surgido a partir de una protesta espontánea realizada por causa de una película contra el Islam realizada en Estados Unidos. Sus comentarios, que causaron mucha controversia y fueron considerados como engañosos para el pueblo estadounidense, le costaron la oportunidad de convertirse en la próxima secretaria de Estado.

En su defensa, Clinton dijo que las controvertidas declaraciones de Rice fueron resultado de un proceso "típico" entre agencias y que aún quedan muchas preguntas sobre el ataque.

"No sabíamos quiénes eran los atacantes o cuáles eran sus motivos", dijo. "La situación sigue siendo un tanto complicada".

Clinton se mostró emotiva e incluso contuvo las lágrimas al describir su sentir personal en relación con la pérdida de los cuatro estadounidenses en Benghazi.

"Esta no sólo es cuestión de política. Es personal. Estuve al lado del presidente Obama cuando los infantes de marina cargaron los ataúdes cubiertos por la bandera desde el avión en Andrews (la base de la fuerza aérea)", dijo Clinton a los senadores. "Abracé a las madres y padres, las hermanas y hermanos, a las hijas e hijos y a las esposas que quedaron solas para criar a sus hijos".

Se espera que por la tarde Clinton continúe con la audiencia sobre el ataque en Benghazi ante un comité de la Cámara de Representantes.